"No éramos ni siquiera humanos para ellos, éramos solo otro juguete para turnarse", dijo Virginia Giuffre, una de las mujeres que lleva años denunciando los vejámenes a los que fue sometida por Jeffrey Epstein y su novia, Ghislaine Maxwell, quien recientemente fue detenida y acusada de seis delitos por actuar en complicidad con el magnate.

Giuffre, al igual que otras víctimas de la red de prostitución, relató los tratos crueles que vivió cuando era adolescente y fue atraída por Maxwell para trabajar supuestamente como masajista de Epstein, cuando en realidad fue abusada desde la primera vez que acudió a la residencia del multimillonario. Por su parte, Maria Farmer, que trabaja como artista y quien también fue víctima de Epstein -junto a su hermana menor- habló de cuando la joven Ghislaine Maxwell presenciaba los abusos del hombre y disfrutaba de ellos.