A la construcción inteligente se le considera como la arquitectura del futuro. Sin embargo, hoy grandes compañías del sector ya trabajan bajo estos parámetros, convirtiéndose en líderes de los nuevos modelos de urbanismo.
Pero ¿qué es la construcción inteligente? Para los expertos, se trata de un tipo de edificación que contempla el manejo de metodologías, herramientas y tecnologías innovadoras, que permiten gestionar de manera integrada y óptima los proyectos durante todo su ciclo de vida, desde la fase de planeación y diseño hasta su operación y mantenimiento. Así, favorece un consumo eficiente de los recursos naturales, reduce costos, tiempos y reprocesos, y, de esta manera, aumenta la productividad y la eficiencia del equipo de trabajo y de la operación del inmueble.
Un ejemplo del avance de este tipo de construcción en Colombia lo ofrece Amarilo, que desde 2016 incursiona en la implementación de métodos como el BIM (Building Information Modeling): se basa en el trabajo colaborativo y en el manejo centralizado de la información gráfica y no gráfica del proyecto, utilizando medios y entornos digitales. “Esto permite realizar simulaciones digitales de todo tipo y, de alguna manera, predecir el comportamiento que tendrá el proyecto en todo su ciclo de vida, lo que también facilita identificar cuáles son las mejores alternativas o elementos más eficientes que deberán componer el mismo. Esto optimiza los procesos para reducir riesgos y aumentar la productividad”, señaló Roberto Moreno, presidente de la compañía.
De acuerdo con el directivo, la primera fase de este proyecto le permitió a Amarilo identificar el potencial y los beneficios del uso de esta metodología, lo que los incentivó a crear, en 2017, una oficina BIM para gestionar su implementación como un proceso interno.
Actualmente, el ciento por ciento de los proyectos de la firma están integrados bajo este modelo, que se gestiona en la nube con la plataforma BIM360. Ella lleva la trazabilidad sobre las observaciones, requisitos de información y desarrollo de las obras durante sus fases de diseño, y, posteriormente, entrega los datos consolidados y listos para su ejecución.
Hoy, el ciento por ciento de los proyectos de la compañía están integrados bajo la metodología BIM (Building Information Modeling).
Hito de edificación
La primera fase del desarrollo de este proyecto coincidió con la construcción del edificio corporativo de Amarilo, diseñado bajo el método BIM, lo que lo convirtió en un hito en materia de edificaciones inteligentes. Implementó tecnologías y sistemas innovadores para monitorear y controlar su funcionamiento y administración. Además, está equipado con espacios flexibles que se adaptan fácilmente a posibles cambios.
Así funciona el edificio
• Con su operación centralizada de monitoreo, integra el funcionamiento de sistemas y equipos que se encuentran automatizados, lo que permite un seguimiento y control en vivo de su funcionamiento, así como evitar su manipulación y operación manual.
• Cuenta con aplicativos que evalúan y controlan de manera automática y remota los sistemas de iluminación y generación de energía fotovoltaica.
• Posee un sistema automatizado de fachada, cuyo funcionamiento se da a través del movimiento de las rejillas comandadas por sensores de CO2 y temperatura, instalados a lo largo del edificio. Esto favorece la ventilación natural y reduce el uso de equipos de aire acondicionado.
• Tiene un sistema de redes basado en fibra GPON, una tecnología innovadora que permite mayor velocidad, limpieza, gran ancho de banda, seguridad y reducción de costos debido a la disminución de infraestructura para su instalación.
• Con los 78 paneles de generación fotovoltaica, entre enero de 2019 y agosto de 2020, se produjeron 75.140 kW/h. Esta generación suple la demanda de energía de la iluminación de sótanos y puntos fijos, y del funcionamiento de sus cuatro ascensores y equipos de bombeo, entre otros. Esto permitió un ahorro de 36.237.000 pesos en ese periodo, y una reducción por emisiones de CO2 equivalente a 880 árboles plantados.
• Tiene un sistema de captación y tratamiento de aguas lluvias, recolección que se redistribuye en baños y sistemas de riego. Además, cuenta con aparatos y accesorios sanitarios ahorradores. Esto ha representado un ahorro de 42 por ciento en el uso de este recurso, lo que aproximadamente equivale a 2.907 metros cúbicos anuales.
• Posee un sistema de calefacción solar, el cual calienta el agua a través de unos colectores, que mantienen la temperatura del agua por dos días y abastece las duchas del edificio. Con ello se evita el uso de calentadores y se disminuye el consumo energético correspondiente a 274 kW/h en el mes.
El futuro
Para Amarilo, el futuro de la construcción inteligente va encaminado a la implementación de tecnologías 4.0 o IoT (internet de las cosas), machine learning y data analytics, entre otros. Ellos permitirán una evolución y mejora exponencial del sector, mediante la integración, digitalización, monitoreo y automatización de los procesos y sistemas que componen una edificación. Con esto se ofrecerá una mayor garantía sobre el uso eficiente de la energía y el agua.
“Entendiendo esto, en Amarilo nos encontramos en la búsqueda continua de tecnologías que nos permitan innovar y mejorar los productos y servicios que ofrecemos a nuestros clientes, haciéndolos también más sostenibles y amigables con el medioambiente”, puntualizó Moreno.
Certificación LEED platinum
Amarilo recibió la certificación Leed Platinum que se les otorga a compañías o proyectos reconocidos por la implementación de estrategias de sostenibilidad con impacto medioambiental, en las que se destacan la eficiencia energética, el uso de energías alternativas y el consumo responsable de agua, entre otros.