Cuando pocos creían que el turismo era una gran apuesta en Colombia, una familia francesa se enamoró de esta tierra e inició en 1957 una desafiante cruzada para atraer visitantes a distintos destinos del país, a través de un emprendimiento que llamó Aviatur. Hoy, al frente de esa aventura se encuentra Samy Bessudo, quien durante los nueve años que lleva como su presidente ha logrado potencializar al máximo el legado de sus antecesores; en especial el de su padre, Jean Claude Bessudo, quien luego de dirigir la empresa durante cerca de cinco décadas le dio paso a una nueva era. Samy tiene muy claro el norte de Aviatur y su responsabilidad como líder de la industria en América Latina: sostenibilidad, sostenibilidad y más sostenibilidad.
Ya no se trata solamente de cuánto crezca el turismo sino de cómo hacerlo de forma responsable, y esto es una tarea muy retadora. ¿En qué concentra Aviatur sus acciones para lograrlo?
SAMY BESSUDO: La primera, y la más importante, es la de ser conscientes del tema, empezar a tener una hoja de ruta; entender a la sostenibilidad como un 360, que no solo impacta al medioambiente, sino que incide en la parte social y económica, y no exclusivamente de la empresa, sino del país. Es un proceso que impacta a nivel interno de la compañía, pasa por educar al viajero y por ser consecuentes con el propósito de que todo lo que hagamos nos convierta en una mejor empresa en el ámbito de la sostenibilidad.
¿Qué es fundamental para que un líder empresarial comience a transitar por ese camino?
S.B.: Incluir a una persona que lidere y maneje los temas de sostenibilidad, bajo un cargo que le permita velar por el cumplimiento de los lineamientos que nos hemos trazado, teniendo en cuenta el campo en el que incide la empresa. Hoy, este es un cargo estratégico.
Debe ser un desafío enorme liderar la transformación hacia la sostenibilidad, cuando hacen parte de la cadena de la aviación comercial, que genera alrededor de 2 por ciento de las emisiones globales de carbono...
S.B.: Por esto es imperativo el compromiso con la climática; ser carbono neutral nos permite avanzar en ese propósito. Además de esta iniciativa, Aviatur apoya otros proyectos clave mediante alianzas estratégicas, como el programa corporativo SAF de Air France - KLM, que impulsa el uso de combustible de aviación sostenible, el programa de reforestación 1+1 de Latam y la siembra de coral y manglar con la Fundación Malpelo y otros ecosistemas marinos.
En este propósito en el cual la sostenibilidad es transversal a todo lo que hacen, ¿qué tanto han podido avanzar en generar cambios reales?
S.B.: Antes hacíamos lo que todo el mundo sigue haciendo. Por ejemplo, dejamos de trabajar con ciertos proveedores de turismo porque ejercían prácticas cuestionables con los animales. Ahora que la tecnología empezó a cumplir un papel importante como otro canal de venta, buscamos explotar al máximo este canal y trabajar de la mano de los viajeros, enseñándoles prácticas para que tengan el menor impacto posible en el medioambiente. Vamos por buen camino, aunque estamos conscientes de que nos queda mucho por recorrer para que podamos llegar a la meta de ser un referente mundial real en temas de sostenibilidad. Tenemos muy claro que la brecha de lo que queda por hacer es enorme entendiendo el nivel de fragilidad en el cual se encuentra no solamente el planeta, sino la sociedad en general.
¿Cómo puede el turismo traducirse en un desarrollo real para las regiones?
S.B.: La idea es que ocurra todo lo contrario para que se desarrollen programas que vayan desde preservar una cultura hasta salvar un ecosistema. Todos hablan de desarrollo, pero no necesariamente lo entienden de la misma manera. Se habla del tema sin ningún tipo de control ni política establecida. Colombia tiene una oportunidad muy grande de ser un referente mundial si no copia los errores de otros. Después de destruir San Andrés y la Riviera Maya, ¿queremos ponerle estructuras de cemento a uno de los países más diversos del mundo? Sigo viendo oportunidades a futuro en el turismo, pero solo si somos conscientes del verdadero concepto de desarrollo y nos mostramos estrictos.
¿Cuál ha sido la clave de Aviatur para mantener su liderazgo en el tiempo?
S.B.: Saberse adaptar a cada uno de los momentos de la historia del país, porque las crisis siempre han existido. De hecho, hay muchos hitos, como la toma del Palacio de Justicia, que fue devastadora para el sector. A partir de ahí gran parte del turismo se fue en picada y luego vino la era de violencia e inseguridad.
¿Por qué Colombia sigue siendo una gran apuesta después de 66 años?
S.B.: ¿Por qué no? Colombia tiene gente maravillosa y mucha diversidad. Lo que creo que más necesita el país para progresar es que haya paz, que traiga justicia social y oportunidades. Es triste saber que tenemos las mejores prácticas para adoptar y mejorar el territorio, pero decidimos seguir los ejemplos que nos han llevado a la devastación total. La búsqueda del bien común no solo se debe enfocar en el bienestar del planeta sino de toda la sociedad. Ojalá las generaciones futuras puedan conocer a un país en paz como todos lo imaginamos.
*Contenido elaborado con apoyo de Aviatur.
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