El parque no solo es “un terreno o sitio cercado y con plantas para recreo, generalmente inmediato a una población” como lo define la Real Academia de la Lengua Española. También es un escenario clave para cumplir con uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de Naciones Unidas: “proporcionar acceso universal a zonas verdes y espacios públicos seguros, inclusivos y accesibles”.

En Bogotá, hay 5.241 parques de carácter público según el Instituto Distrital de Recreación y Deporte (IDRD), de los cuales 276 se encuentran en la localidad de Usme. Desde el pasado mes de abril, este número se incrementó con la entrada en funcionamiento del Parque Reserva de San David, construido por Compensar, con una inversión de 4.423 millones de pesos y, en el cual, se generaron 350 empleos, entre directos e indirectos, durante su construcción.

Al margen de ser un requerimiento urbanístico, este proyecto persigue fines superiores. Según Gloria Cristina Gutiérrez, coordinadora del Programa de Desarrollo Social Comunitario de Compensar, “representa la oportunidad de poder articular el entorno pues el parque está ubicado en una zona de alta densidad poblacional en la que son escasos los lugares para la integración comunitaria”.

Precisamente, a través de este nuevo escenario recreo-deportivo, se promoverá el desarrollo de la comunidad en sus 34.359 metros cuadrados de extensión, distribuidos en una amplia infraestructura deportiva, zonas verdes y para el esparcimiento, que contribuirán a impactar favorablemente la calidad de vida de las familias que allí residen.

El Parque Reserva de San David beneficiará a más de 25.000 personas de Usme y de otras localidades aledañas como San Cristóbal, Ciudad Bolívar y Rafael Uribe Uribe, al sur de la capital. Cuenta con canchas múltiples de microfútbol, baloncesto y voleibol, una cancha de fútbol 5, un patinódromo con pista peraltada para pruebas de pista y un área para el patinaje artístico, además de espacios para las actividades infantiles y un gimnasio.

“A parte de la funcionalidad que tiene el parque para integrar, fomentar el deporte, la actividad física y el sano aprovechamiento del tiempo libre, hay unos componentes territoriales y ambientales que también trae consigo esta obra. Por ejemplo, abarca cerca de tres cuadras y se convierte en un facilitador de movilidad en la zona porque comunica la parte alta y baja de los barrios, lo que además trae consigo una mayor percepción de seguridad”, aseguró Gutiérrez.

De acuerdo con la directiva, actualmente se adelanta la última parte del proceso previo a la entrega del parque al Distrito, que se encargará de su administración.

El Parque Reserva de San David beneficiará a más de 25.000 personas de Usme y de otras localidades aledañas como San Cristóbal, Ciudad Bolívar y Rafael Uribe Uribe, al sur de la capital. | Foto: Compensar

Fortalecimiento de la vida en comunidad

El parque, cuya construcción duró cinco años (2018 a 2023), será, de acuerdo con Gutiérrez, “una infraestructura aliada de los procesos de formación en liderazgo que se vienen ejecutando allí, para que los líderes y lideresas sigan promoviendo la apropiación del territorio y otras actividades que se traducen en el fortalecimiento de la vida en comunidad”, algo que se viene ejecutando desde el Programa de Desarrollo Social Comunitario de Compensar, incluyendo otras acciones como un cineforo para el encuentro intergeneracional e intercambio de saberes entre  personas mayores y jóvenes.

En línea con lo anterior, los nuevos líderes de Reserva de San David se han articulado con las redes de trabajo social de las instituciones públicas del Distrito, un factor que ayuda a maximizar el modelo de desarrollo comunitario que implementa la caja de compensación.

“Nuestro propósito trasciende la construcción de vivienda y, por lo tanto, gracias al Programa, llevamos 11 años generando sinergias en las comunidades a partir de cuatro ejes: articulación con redes, formación y capacitación, gestión dotacional para el aprovechamiento de las zonas comunes y, finalmente, autogestión y empoderamiento comunitario”, explicó Gutiérrez.

Desde que inició en el 2013, el Programa de Desarrollo Social Comunitario ha consolidado importantes resultados: se ha implementado en 16 proyectos de vivienda, 170 personas se han formado como líderes sociales y, aproximadamente, se han generado 350.000 servicios anuales por persona (formativos, recreativos, entre otros), de los cuales 11.000 se producen en Reserva de San David.

A lo anterior se suma que, durante el año anterior, la organización impactó con este Programa a 93.665 personas, un 53 por ciento más que en 2022, principalmente con las líneas de liderazgo, recreación y deportes.

En 2023, el Programa también capacitó a la población en finanzas sanas y protección del medioambiente, realizó talleres pedagógicos en medios audiovisuales y tendencias deportivas y promovió festivales culturales que reunieron a más de 8.200 personas de todas las edades.

“Contribuimos a elevar la calidad de vida de las personas y mejorar su bienestar, porque no es lo mismo un conjunto residencial donde solo voy a dormir, a uno donde se vive y se trabaja por el entorno en temas ambientales, deportivos y de ciudadanía, algo que, sin duda, se verá fortalecido en Reserva de San David, a propósito de la apertura del nuevo parque”, concluyó Gutiérrez.

*Contenido elaborado con apoyo de Compensar