El sector de la construcción se mantiene como uno de los líderes de la recuperación económica en la capital del país. A noviembre de 2022, reportó la venta de 218.984 unidades de vivienda; de las cuales 76.369 fueron vendidas en Bogotá y Cundinamarca. De hecho, el inicio de nuevas construcciones de vivienda en la ciudad se incrementó un 16,4 por ciento este año.

Estas cifras de Camacol Bogotá y Cundinamarca, B&C, evidencian que el sector se mantiene sólido, a pesar de las crisis económica global. En la región, la actividad edificadora generó 368.000 empleos y demandó insumos por más de 8 billones de pesos, según datos de Coordenada Urbana.

“Estos son aportes del sector al desarrollo de la región que son bien identificados y asociados a la actividad de la construcción, pero más allá de las cifras, nos hemos consolidado como un sector que cada vez tiene más por aportar al bienestar de las personas y que es un aliado del desarrollo sostenible”, señaló Alejandro Callejas Aristizábal, gerente de Camacol B&C.

Con respecto a su compromiso por la sostenibilidad ambiental y social, explicó que de la mano de los proveedores trabajan para implementar un modelo de economía circular y avanzar hacia la transición energética para reducir emisiones de CO2.

Uno de los proveedores que se vinculó a este proyecto de sostenibilidad del sector constructor es Enel, que ha liderado iniciativas para cuidar el medioambiente. Además, ofrece un portafolio con soluciones solares.

Carlos Mario Restrepo, gerente de Enel X, una línea de negocio encargada de aportar a la transición energética, explicó que “la instalación de los sistemas solares se ajusta a las necesidades del cliente, según el espacio dispuesto en las edificaciones. Entre ellas, se encuentran los modelos coplanares, inclinados, en suelo o carport, que se realizan a la medida, según las necesidades de cada caso”.

De esta manera, los constructores y sus clientes finales pueden beneficiarse de producir energía según sus necesidades, ya que obtienen beneficios tributarios, generan ingresos a través de la venta de excedentes de energía, ahorran en la factura y reducen su huella de carbono.

Estas iniciativas ayudan a promover la sostenibilidad en un sector con gran demanda, que ahora asumió el reto de mejorar sus prácticas para aportar de manera positiva al medioambiente.