En medio de la crisis, una de las directrices del rector general de la Universidad Santo Tomás, fray José Gabriel Mesa Angulo O.P., ha sido atender de manera integral a toda la comunidad tomasina, desde lo educativo, práctico, mental y espiritual.
Sobre eso, el decano de la Facultad de Cultura Física, Deporte y Recreación de esa institución, Francisco Javier Fonseca, destaca el importante rol que ha tenido la actividad física y el deporte para afrontar diversas problemáticas a través de la historia de la humanidad. Aprovechar los avances científicos, entender esta práctica como un fenómeno que involucra la interacción social e identificar el amplio rango de oportunidades laborales que se han creado en los últimos años, son algunos de los retos para alguien que quiere dedicar su vida al deporte.
Una época de aprendizaje
El aislamiento fue sin duda uno de los desafíos más importantes para las instituciones educativas, y mucho más, por supuesto, para las dependencias que abordan temas prácticos o de movimiento.
Estas restricciones hicieron que los profesores y la universidad centraran sus esfuerzos en buscar nuevas alternativas de simulación física, es decir, fue necesario encontrar soluciones apalancadas en la tecnología que permitieran imitar algunas acciones motrices para que luego se pudieran practicar de verdad. “No es posible reemplazar ciertas actividades a través de la virtualidad, pero sí es posible hacer aproximaciones para que las personas no pierdan las habilidades”, explica el decano.
Por supuesto, esta nueva edición de los Juegos Olímpicos será la plataforma perfecta para ver innovaciones científicas y académicas: nuevas disciplinas, trajes especializados mejorados o la aplicación de la tecnología al servicio de la organización de la competencia. “El deporte cambia cada año y la ciencia lo respalda. Los Juegos Olímpicos serán la muestra de cómo la innovación está presente en la relación ciencia, academia y logros deportivos”, agrega el directivo.
El deporte, una carrera con proyección
El imaginario de que la docencia en educación física era la única opción para profesionalizarse en el deporte, recreación y la actividad física está cambiando. La necesidad de contar con profesionales que puedan analizar las problemáticas de cada país y ofrecer soluciones adecuadas ha hecho que la Santo Tomás cuente con una carrera adecuada. “Nuestros graduados salen con una visión humanista y crítica de las necesidades sociales, con bases en investigación e, incluso, en creación de empresas”, dice el decano de la Facultad de Cultura Física, Deporte y Recreación.
En la Universidad se destacan también las diferentes materias que los estudiantes encuentran en el transcurso de la carrera, teniendo particular relevancia la línea de emprendimiento para que un estudiante esté en capacidad de desarrollar un proyecto propio acorde a las necesidades de la sociedad. “Puede elegir desde ser un profesor de educación física en instituciones educativas, un entrenador deportivo o físico, gerenciar instituciones deportivas o incluso crear su propia empresa. El mercado se ha dinamizado. Hay mayores posibilidades de ocupación. Por eso la universidad amplía la visión para que el estudiante aprenda de manera humanista a ser crítico en un contexto de las necesidades sociales.”
Sobre la infraestructura para poner en práctica todo lo aprendido, Fonseca resalta el completo Campus San Alberto Magno: “Este campus tiene la visión de una villa olímpica, donde convergen escenarios para diversos deportes, laboratorio de biomecánica, cámaras, entre otros avances al servicio del aprendizaje”.
Así las cosas, opina el decano, la ‘Santoto’ ha logrado consolidar programas de profesionalización que le permitirá a los estudiantes contar con las herramientas necesarias para innovar y emprender en un área que, se verá durante las próximas semanas en los Juegos Olímpicos, lo exige cada vez más.