Proteger el lugar donde se vive de las inclemencias del clima ha sido una prioridad del ser humano. A lo largo de la historia, la arquitectura ha dado respuestas a esta necesidad, sin embargo, fueron unos granjeros del norte de Alemania los que crearon la solución hace cerca de 70 años.
Con el fin de salvaguardar sus cosechas montaron al frente de sus graneros una estructura en madera que permitía absorber la humedad, contener la lluvia y garantizar la ventilación natural. Esta iniciativa fue tomada por los arquitectos e ingenieros para crear lo que en la actualidad se conoce como fachadas flotantes y ventiladas, que no solo sirven como protector térmico, sino también como elemento arquitectónico para las edificaciones.
Históricamente, en la elaboración de este sistema constructivo se ha usado metal o cerámica. Sin embargo, las resinas plásticas de ingeniería han venido ganando protagonismo. En Colombia, la compañía líder en el procesamiento de este tipo de materiales incursionó en este campo y marca la diferencia por agregarle un enfoque innovador y sostenible a sus productos.
Se trata de IPROCOM S.A., una empresa que nació hace 17 años en las aulas de la Universidad Eafit en Medellín, y que hoy se encuentra a la vanguardia en la transformación de resinas plásticas para la industria manufacturera, específicamente en los subsectores de electrodomésticos y automotriz. Hoy, su cobertura es mucho mayor.
Según Juan Carlos Zuleta, gerente general, esta firma tiene en su ADN la innovación y gracias a esa capacidad para generar valor agregado creó un producto al que llamó IPROPANEL®, que define como “una solución innovadora y sostenible para el revestimiento de fachadas y la decoración de espacios interiores y exteriores”.
Su proceso de fabricación se basa en los principios de la economía circular, los cuales permiten que IPROPANEL®️ reincorpore material post-industrial y sea ciento por ciento reciclable a lo largo de su vida útil. Actualmente cuenta con una capacidad para producir 20.000 metros cuadrados mensuales para los que requiere como insumo cerca de 120 toneladas de materia prima, ciento por ciento reciclable.
Este proyecto se desarrolló entre 2017 y 2018, y se lanzó al mercado un año después, pero la pandemia obligó a detenerlo. En 2021 se reactivó y luego de dos años se convirtió en una exitosa línea de negocio “que proyecta llegar a tener cerca del 50 por ciento de la facturación de la compañía en los próximos años”.
Mil atributos
En un mercado en el que el material predominante en la fabricación de estas estructuras es el metal, la introducción del ABS, catalogado como un polímero de ingeniería, es un hito porque brinda beneficios a corto y largo plazo no solo a los constructores sino también a las personas que viven o trabajan en las edificaciones.
“A través de IPROPANEL® estamos reincorporando material que iba a ser descartado. De esta forma ofrecemos un producto sostenible, con muchos atributos y altos estándares de desempeño”, precisó Zuleta.
El ABS es liviano, resistente, anticorrosivo, ecoamigable, un efectivo aislante térmico y antiflama, y desde lo estético, clave en la actividad constructiva, pues la compañía tiene diseños estándar y elabora otros de acuerdo con las necesidades de los clientes, con una amplia gama de colores y acabados: texturizados, planos, brillantes y matizados.
En varias ciudades de Colombia ya hay proyectos que cuentan con este tipo de fachadas elaboradas con IPROPANEL® como, por ejemplo, el edificio Torre del Reloj y un auditorio de la Corporación Uniminuto, ubicados en el norte de Bogotá; el edificio Ribeira en Cartagena, y el Complejo Olímpico del municipio de Copacabana, Antioquia.
Agenda 2030
Zuleta valoró el impacto positivo que el uso de este material genera en seis de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de Naciones Unidas. “En el 9 porque somos una empresa industrial con un producto innovador; en el 11 y el 12 por el manejo de materia prima de uso post-industrial reintroducida al ciclo productivo y que alarga su vida útil; en el 13 porque disminuimos la cantidad de emisiones al reducir la cantidad de materia prima que demandamos, y en el 14 y el 15 porque aportamos un granito de arena evitando que residuos plásticos lleguen al mar, a los ríos, a lagos y bosques”, detalló.
Además, y también en sintonía con los ODS, destacó que la compañía continuará innovando, generando empleo y promoviendo el desarrollo sostenible en el país. Con 17 años de existencia, IPROCOM S.A. robustece su posición de líder nacional en la fabricación de componentes plásticos de muy alto desempeño con un producto innovador y sostenible que contribuye a proteger los inmuebles de las inclemencias del clima y embellecerlos, e impactar positivamente en el medioambiente y la sociedad.
Contenido elaborado con el apoyo de Iprocom.
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