Para mejorar la calidad del servicio de energía y disminuir las horas de interrupciones que se presentan desde hace 15 años en la costa caribe, Afinia, filial del Grupo EPM, invirtió cerca de 2 billones de pesos en la renovación de los activos eléctricos y el control de pérdidas de energía. Hace tres años, cuando asumió este reto, se encontró un panorama bastante desafiante y que requería atención inmediata. Hoy, el balance es positivo no solo porque se ha garantizado la continuidad en la prestación del servicio, sino gracias a que los indicadores de calidad son muy superiores a 2019.

“Cuando llegamos, los indicadores de duración de interrupciones en promedio al año eran 122 horas, nosotros cerramos 2022 con 74 horas, una disminución de 48 horas en promedio por usuario, que era lo que habíamos proyectado para 2026. En tres años hemos logrado mejorar la calidad de vida de nuestros clientes”, precisó Javier Lastra, gerente general de Afinia.

Javier Lastra Fuscaldo, Gerente General de Afinia S.A. ESP. | Foto: Juan Carlos Sierra

Sin embargo, los desafíos continúan y por ello, cuenta Lastra, seguirán trabajando en obras de infraestructura eléctrica de alta, media y baja tensión, mejorando las condiciones de las subestaciones, construyendo nuevas y reponiendo transformadores de potencia, de distribución, redes eléctricas, entre otras obras.

Además, seguirán concentrando esfuerzos en alcanzar el equilibrio entre la calidad del servicio y unas tarifas asequibles a la capacidad de pago de la gente. De hecho, la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios (SSPD) reconoció que la tarifa de Afinia se mantiene dentro del promedio a nivel nacional, sobre los 28 Operadores de Red (OR).

De esta manera, la empresa evita hacer alzas abruptas que afecten a sus usuarios, reconociendo los esfuerzos que realizan para pagar de manera oportuna su factura de energía, teniendo en cuenta la coyuntura económica que atraviesa el país. Sin embargo, de 1,8 millones de usuarios con los que cuenta la empresa en los departamentos de Bolívar, Córdoba, Sucre, Cesar y 11 municipios de Magdalena, el 90 por ciento pertenece a los estratos 1, 2 y 3, todo un desafío para el recaudo que se requiere para continuar con el robusto plan de inversiones planteado a 2025.

“El reto es encontrar el punto de equilibrio entre ofrecer un servicio de calidad a una tarifa cómoda para los usuarios y que permita apalancar las inversiones que se deben hacer; para ello, es necesario trabajar con todos los actores del sistema eléctrico del país y encontrar una fórmula que nos permita seguir adelantando el proceso de modernización, sin comprometer la sostenibilidad de la compañía”, afirmó Lastra.

*Contenido elaborado con el apoyo de Afinia.