El agua ha sido un recurso escaso por excelencia en la Alta Guajira. El cambio climático ha contribuido a que cada vez sea más difícil acceder al recurso por la disminución de las precipitaciones en las últimas décadas. La alternativa de excavar pozos profundos y hacer estanques como reservorios ha sido una solución limitada, en vista de los largos trayectos que deben recorrer las familias Wayuu para recolectarla.
La Fundación Alpina, el laboratorio social para la inclusión y productividad rural sostenible en Colombia que lleva diez años trabajando con comunidades Wayuu en la Alta Guajira, se propuso encontrar una solución ecológica a esta problemática. Es así como desarrolló sistemas de riego por goteo mediante pozos profundos, los cuales utilizan sistemas de bombeo que funcionan con energía que proviene de paneles solares para abastecer las unidades productivas comunitarias.
La iniciativa, además de perseguir que las comunidades dispongan de agua, promueve su adaptabilidad al cambio climático, mientras reconoce las alternativas de los saberes ancestrales y la innovación social y tecnológica.
El impacto de este proyecto, y la articulación que tiene la Fundación Alpina con la comunidad, ha permitido que hoy en día seis de las nueve comunidades del territorio dispongan de agua las 24 horas de los siete días de la semana. Las otras tres, cuentan con al menos ocho horas diarias de agua. Este reservorio sirve de despensa para el riego de las huertas caseras y demanda de agua del hogar.
Como resultado se logró incrementar la productividad en un 84 por ciento para el autoconsumo y la disponibilidad de alimentos creció en un 26 por ciento. Esto ha permitido el acceso a diversidad de alimentos con alto contenido nutricional en todos los meses del año
La Fundación Alpina considera viable captar inversión para alcanzar este tipo de soluciones, mediante la articulación de diferentes sectores como la academia, la cooperación internacional y el sector público. El acceso al agua es un derecho fundamental que demanda de la atención de los distintos actores de la sociedad. Por eso, con la finalidad de seguir incrementando la disponibilidad del recurso en el territorio, el laboratorio social en alianza con universidades decidió captar iniciativas potenciales a través de la convocatoria “retos de innovación”, que actualmente se encuentran en estudio para su implementación. De esta manera, se propone seguir trabajando en conjunto con las comunidades Wayuu.