Si antes de la pandemia se hablaba del desarrollo de ciudades inteligentes, ahora la conversación es sobre la construcción de una cultura inteligente en la que la tecnología atraviesa todas las dimensiones de un ciudadano: laboral, académica, social, de entretenimiento, de consumo y la relación con las ciudades a través de la interacción con las entidades públicas.

“Tras la aceleración de los últimos dos años podemos decir que la verdadera transformación digital radica en la construcción de un diálogo eficiente entre dos mundos: el real y el virtual. Solo así lograremos la adopción de una cultura inteligente en la que el uso de la tecnología esté enfocado en mejorar la calidad de vida de los ciudadanos”, explica Sergio González Guzmán, presidente de ETB.

Así, una mujer que es víctima de violencia puede encontrar la mano tendida de una entidad como la Secretaría Distrital de la Mujer en Bogotá que, tras escuchar su caso, pone a disposición el aparato público para cobijarla, sacarla del entorno de riesgo y encontrarle nuevos caminos para su bienestar. Esto es posible gracias a la plataforma que soporta la Línea Púrpura, creada por ETB, en donde le brindan ayuda al alcance de un contacto telefónico o por WhatsApp.

Sergio González Guzmán, presidente de ETB. | Foto: Fotos y Direccion de Arte by Camilo Espitia

Otro ejemplo lo tiene Barranquilla, en donde es más fácil la interacción de sus ciudadanos con las entidades públicas gracias a ALBA, una plataforma que facilita la gestión de 100 servicios y trámites a través de un asistente virtual, WhatsApp, Telegram y Web de la Alcaldía; una línea telefónica; el sistema para autogestión de turnos presenciales, y un canal de atención especializado para personas sordas. Esta herramienta omnicanal diseñada a la medida por ETB y su aliado Silice, tiene dos reconocimientos: en la categoría ‘Iniciativa TIC Incluyente e Innovadora’, por el Premio Iberoamericano InnoPolítica, y el Premio Iberoamericano UIM a la excelencia en la gestión de la Comunicación Pública.

Ecosistemas digitales

Las organizaciones tienen el reto de manejar grandes cantidades de información de manera segura y eficiente, a través de herramientas como nube pública, big data o analítica, en un contexto donde crear la huella digital de un usuario se traduce en beneficios como, por ejemplo, la plataforma Dra. Clara de la Secretaría de Salud de Bogotá, un diseño de la ETB que contribuyó al control de la pandemia gracias al seguimiento de 700.000 pacientes asintomáticos con covid a través de inteligencia artificial.

Esto es una realidad gracias a aliados que disponen de soluciones digitales para apoyar esta transformación. Así, un trabajo conjunto con grandes de la tecnología como AWS, Google, Fortinet, Microsoft y Five9 facilitan los cuatro ejes sobre los que ETB basa su acompañamiento: ecosistemas digitales, nube híbrida, seguridad y analítica.

“Estas herramientas les permiten a las organizaciones desarrollar su propia cultura inteligente a través de un ecosistema digital y social para adoptar tecnologías de la información y comunicación que mejoren la calidad de vida de los usuarios”, precisó Camilo Olea, vicepresidente de Empresas y Ciudades Inteligentes de ETB.

En esencia, si la transformación digital promueve mejores decisiones colectivas, y si los ciudadanos y las empresas progresan a través de la apropiación de estas herramientas, nuestro país podrá ser cada vez más equitativo e incluyente para el bienestar de todos.