El deseo natural de las niñas y niños por jugar y explorar lo novedoso contribuye a su crecimiento y desarrollo. Sin embargo, ese mismo interés puede ser utilizado de manera inadecuada, por ejemplo, cuando un personaje o caricatura los invita a comer productos que, consumidos habitualmente, pueden perjudicar su salud. Por eso Red PaPaz, en su campaña de bien público ‘BASTA: No comas más mentiras ni se las des a tus hijos, saquemos la publicidad de comida chatarra de su mundo’, hace un llamado sobre la necesidad de regular la publicidad y promoción dirigida a niñas, niños y adolescentes de productos ultraprocesados altos en azúcar, sodio y grasas saturadas (conocidos más comúnmente como comida chatarra). PANORAMA NACIONAL Las cifras nacionales de exceso de peso muestran un panorama alarmante. La Encuesta Nacional de Situación Nutricional 2015 evidencia que uno de cada 4 ni- ños entre 5 y 12 años tiene esta condición; en los adultos se encontró que, en 4 años, pasamos del 51.2% al 56.4%. Ahora bien, los expertos en desarrollo infantil señalan con especial énfasis que en la infancia aún no se han desarrollado las herramientas necesarias para reconocer si los alimentos y bebidas promocionados en los avisos de los medios de comunicación son nutritivos y buenos para su salud. Esta ‘comida chatarra’ se muestra a través de la publicidad con mascotas, personajes, premios, concursos y declaraciones que los presentan como nutritivos, por ejemplo con fibra, con vitaminas, libre de grasa, etcétera. De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS), emitió en el 2010 las Recomendaciones sobre la promoción de alimentos y bebidas no alcohólicas dirigida a los niños, advirtiendo sobre los efectos negativos que puede tener la publicidad y esas formas de mercadotecnia de alimentos y bebidas dirigidas a menores de edad que suelen promocionar productos sin advertir sus excesos de grasas, azúcar o sal. En este sentido, al organismo internacional le preocupa el amplio alcance de la promoción de estos productos por medio de estrategias como la televisión o Internet. Para Red PaPaz resulta alarmante que, a pesar de que la OMS insta a los países a acoger estas recomendaciones desde 2010, Colombia, a diferencia de otros de la región, no ha desarrollado nuevas políticas ni ha reforzado las existentes para proteger a los niños frente a la publicidad de los productos ultraprocesados altos en azúcar, sodio y grasas saturadas.¿POR QUÉ HAY QUE REGULAR LA PUBLICIDAD DIRIGIDA A NIÑOS? La evidencia muestra que esta propaganda y sus prácticas promocionales fomentan el consumo habitual de dichos productos, y por eso Red PaPaz ha levantado su voz frente al problema. Cabe resaltar que el contenido de la campaña tiene soporte en múltiples estudios científicos y epidemiológicos que la respalda. Esos documentos se encuentran para consulta en la página web www.nocomasmasmentiras.org. Carolina Piñeros, directora ejecutiva de Red PaPaz, explica que en la lucha mundial contra la malnutrición, el sobrepeso y la obesidad hay cuatro acciones claves para combatirlas: Una, regular esta publicidad dirigida a menores de edad. Dos, promover entornos escolares saludables. Tres, exigir claridad en las etiquetas. Y cuatro, adoptar los llamados impuestos saludables (por ejemplo, a bebidas endulzadas). Esta campaña es el resultado de un trabajo basado en encuestas y en 16 grupos focales en diferentes ciudades del país. Con los resultados obtenidos, Red PaPaz y sus aliados definieron una estrategia que incluye mensajes en medios de comunicación para invitar a la sociedad en general a reflexionar sobre la inconveniencia de estos mensajes publicitarios y el peligro de que los menores de 18 años consuman habitualmente estos productos. Aunque la campaña fue muy bien aceptada y recibida en las redes sociales, varios canales de televisión y emisoras de radio se negaron a transmitirla. “BASTA: No comas más mentiras, ni se las des a tus hijos, saquemos la publicidad de comida chatarra de su mundo” cuenta con el apoyo de instituciones de la sociedad civil colombiana como FIAN Colombia, Educar Consumidores, la Alianza por la Salud Alimentaria y entidades internacionales como El Poder del Consumidor (México), ACT, Heala, Alianza por la Alimentación (estas tres últimas de Brasil), Vital Strategies (USA) y Global Health Advocacy Incubator (USA).Bloomberg Philanthropies ha apoyado económicamente esta iniciativa. A la campaña se suman día a día nuevas organizaciones que apoyan esta idea fundamental para Colombia y para muchos países en vías de desarrollo.