Al tiempo que las innovaciones tecnológicas se involucran más en la vida cotidiana de las personas por medio de diferentes dispositivos como computadores portátiles, teléfonos móviles, tabletas, entre otros, las dificultades visuales han aumentado por cuenta de la constante sobreexposición a factores como las emisiones de la luz azul violeta.
Según la Organización Mundial de la Salud, cerca de 2.200 millones de personas en el mundo (casi un tercio de la población global) padecen algún tipo de dificultad visual.
Colombia no es la excepción y los cálculos muestran que una de cada tres personas en el país presenta alguna afección visual como miopía, hipermetropía, astigmatismo y presbicia, entre otras.
Nury Herrera, optómetra y jefe de la Dirección Científica de GMO Colombia, explicó cuáles son las afecciones visuales más comunes. “La miopía es una de las más notables. Hoy en día estamos muy enfocados en aparatos tecnológicos como pantallas y celulares”, apuntó.
El astigmatismo es la distorsión para enfocar un objeto de lejos o de cerca; la hipermetropía es la dificultad para ver de cerca y la presbicia dificulta enfocar de cerca y afecta principalmente a quienes tienen más de 40 años.
Por eso, como resaltó Herrera, es clave hacer un examen visual anual para detectar a tiempo estas dificultades y prevenir enfermedades que pueden desencadenar problemas mayores como, por ejemplo, glaucoma, cataratas y degeneración macular (un trastorno que deteriora la visión central y aguda).
Tecnologías para mejorar la salud visual
Gracias al desarrollo de nuevas tecnologías, como las de la firma Essilor®, el tratamiento de las enfermedades visuales llegó a una nueva etapa orientada a un cuidado más robusto de la salud visual.
Herrera precisó que la red de ópticas GMO ya puso a disposición de los pacientes una nueva tecnología llamada Eyezen, orientada a lentes monofocales para tratar afecciones como miopía, hipermetropía y astigmatismo. “Eyezen se usa para las nuevas necesidades de todas las personas que quieren mantenerse conectadas todo el día a los diversos tipos de pantallas”. Con esta solución, aseguró, la superficie del lente optimiza la distancia en dirección de la mirada, lo cual garantiza una mejor corrección y la reducción de las distorsiones.
Además de Eyezen, hay una nueva alternativa llamada Crizal®, que con su tecnología los lentes de los pacientes logran mayor durabilidad y claridad. Este desarrollo tiene dos soluciones: la primera, Crizal® Prevencia, que contrarresta los efectos de la luz azul y violeta que pueden ser nocivos para la salud visual y también cuenta con un factor de protección SPF 35 que previene el envejecimiento prematuro de los ojos. “Este lente además repele agua, polvo, grasa y tiene una capa adicional que evita los rayones”, detalló Herrera.
Finalmente, Crizal® también cuenta con el tratamiento Saphire HR que garantiza transparencia y, de paso, una tecnología que evita los rayones en los lentes. “También tiene una tecnología que se llama multiocular 360, que hace que se filtre luz azul nociva en todas las direcciones”, concluyó Herrera.
*Contenido elaborado con el apoyo de GMO.