El Área Metropolitana del Valle de Aburrá conecta a los nueve municipios y el Distrito de Medellín, es autoridad ambiental y de transporte público, articulador y planificador territorial. Es, sin duda, una entidad que impulsa proyectos de desarrollo para las regiones con impacto en la calidad de vida de sus habitantes. En su Plan de Gestión 2024-2027, el trabajo se enfoca no solo en el cuidado y protección de los recursos naturales y del entorno, sino también en apuestas como la economía circular, la cultura ciudadana y el río Aburrá Medellín. Una visión estratégica gracias a la Junta Metropolitana presidida por el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, e integrada por los nueve alcaldes de los municipios, y que hace posible que se avance en un plan ambicioso de transformación del territorio. Esto sin dejar por fuera programas como SIATA, Parque de las Aguas, CAVR y EnCicla, el Sistema de Bicicletas Públicas en el que se trabaja en su recuperación, luego de un periodo de total abandono.

Paula Andrea Palacio Salazar, directora del Área Metropolitana del Valle de Aburrá, aseguró que la subregión tiene el desafío de responder a las condiciones que plantea el crecimiento acelerado de la población y la pérdida de la biodiversidad y de los recursos naturales, entre otras problemáticas del territorio. “Las dinámicas sociales del territorio han transformado el medio natural con las afectaciones ambientales, el cambio climático y la calidad del aire. El crecimiento de la población nos invita a repensar modelos de ocupación y transporte sostenible. Un ejemplo de ello es la construcción del Tren del Río, que es un complemento importante al sistema masivo de transporte del Valle de Aburrá”, explicó.

Palacio tiene claro que cuando se presentan problemas de fondo las soluciones deben ser estructurales, así los resultados sean a largo plazo. “Nuestro Plan de Gestión 2024-2027 se enfoca en la sostenibilidad ambiental con una visión en la que son protagonistas el río Aburrá - Medellín, como eje estructurante del territorio; la economía circular, como pilar de la sostenibilidad y la cultura ciudadana, en la cual la confianza y la seguridad nos permiten trabajar de una forma armónica y articulada entre los diez municipios asociados; la academia; el sector empresarial y demás actores, teniendo al ciudadano en el centro de nuestras acciones”, precisó.

Paula Andrea Palacio, directora del Área Metropolitana del Valle de Aburrá. | Foto: Juan Carlos Sierra

La entidad quiere reposicionar al río como eje del desarrollo de la región y el departamento. Para ello, proponen mirarlo de manera integral y en toda su complejidad, desde el medio ambiente y la gestión del riesgo, y potenciarlo como un corredor verde que convoca y posibilita una infraestructura para la movilidad sostenible. Por eso, afianzará los programas que controlan la calidad y cantidad del agua de la corriente principal y sus afluentes, mediante la operación de una red de monitoreo y puntos de control establecidos en RedRío, además del desarrollo de acciones para mejorar las microcuencas del Plan Quebradas.

Recuperar la confianza

La economía circular es el otro gran énfasis que direcciona la gestión del Área Metropolitana del Valle de Aburrá. “Crearemos un ‘Hecho Metropolitano’ que involucre a todos, desde los hogares hasta las empresas, con educación ambiental, aprovechamiento de residuos, promoviendo el reciclaje, la reutilización y la recuperación de materiales, el ecodiseño y la gestión eficiente del agua y la energía. Nos apoyaremos en innovación, tecnología y ciencia para generar transformaciones económicas, ambientales, territoriales y sociales. Se trata de una estrategia integral para reducir, controlar y mitigar el impacto ambiental de las actividades humanas”, aseguró Palacio.

La otra gran apuesta enlazada con este propósito es la de promover la cultura ciudadana, porque desde la entidad el ciudadano está en el centro de todas sus acciones. “Estamos trabajando para recuperar la confianza en lo público, vamos a fortalecer la articulación entre los diferentes actores de la sociedad, con el foco puesto en mejorar la calidad de vida para los habitantes del Valle de Aburrá”, advirtió.

La estación La Picacha La 76 fue recientemente intervenida y recuperada para el uso de los ciudadanos. | Foto: Getty Images

A rodar EnCicla

Desde su creación, el Sistema de Bicicletas Públicas ha sido reconocido como una opción de movilidad sostenible. Sin embargo, en los últimos años el abandono y los daños estructurales y físicos se hicieron evidentes.

“Dejaron EnCicla en cuidados intensivos. El 87 por ciento de las estaciones manuales y automáticas tenían daños estructurales y físicos, había fallas en la tecnología y 663 bicicletas que compraron en octubre de 2023 presentan problemas estructurales. Por eso, trazamos una ruta de trabajo y empezamos a recuperar el sistema para que vuelva a ser referente de movilidad sostenible”.

Con una inyección importante de recursos avanza el plan de recuperación. Entró de nuevo en funcionamiento la estación La Picacha La 76, una de las más afectadas por vandalismo, y la del municipio de Itagüí. Nuevos repuestos y herramientas, y el lavado ecológico de 1.122 bicicletas hacen parte de las acciones.

Las tareas también incluyen personal de apoyo y mantenimientos preventivos. Además, se adelantan acciones pedagógicas para fomentar el cuidado, el sentido de pertenencia y seguir motivando el uso de la bicicleta como medio de transporte.

*Contenido elaborado con apoyo del Área Metropolitana del Valle de Aburrá