El número de rinocerontes muertos a manos de cazadores furtivos en Sudáfrica se redujo a la mitad en los primeros seis meses del año, informó este viernes la ministra de Medioambiente. El número de casos volvió sin embargo a crecer a medida que se levantaban las restricciones relacionadas con la pandemia de la covid-19, añadió Barbara Creecy en un comunicado. "Durante los primeros seis meses de 2019, 316 rinocerontes habían sido cazados ilegalmente en Sudáfrica", recordó la ministra y un total de 166 rinocerontes fueron cazados en los primeros seis meses de 2020, lo que representa una caída de casi el 53% con respecto a los 316 de 2019. "Hemos podido detener la escalada", celebró Creecy. Le recomendamos: Tráfico de fauna silvestre favorece nuevas enfermedades infecciosas Sudáfrica lucha desde hace años contra la caza furtiva de rinocerontes, alimentada por una fuerte demanda de sus cuernos en Asia, especialmente en China y en Vietnam, donde son considerados como afrodisíacos, un símbolo de estatus, o utilizados en la medicina tradicional. El ministerio atribuyó su éxito en estas cifras a una década de varias estrategias, así como a las interrupciones en la cadena de suministro derivadas de las restricciones impuestas a los viajes durante el confinamiento en el país. El cuerno de rinoceronte está compuesto principalmente de queratina, la misma sustancia que las uñas humanas. Normalmente se vende en forma de polvo y se promociona como cura contra el cáncer y otras enfermedades. Incautación de cuernos Hace un par de semanas los servicios de aduana del aeropuerto internacional de Johannesburgo incautaron decenas de cuernos de rinoceronte avaluados en 7 millones de dólares.

Sudáfrica es el país con mayor número de rinocerontes en el mundo.  Durante una inspección de un depósito del aeropuerto, funcionarios de aduanas apoyados por perros rastreadores detectaron productos que estaban declarados como obras de arte y tenían como destino Kuala Lumpur, en Malasia, vía Doha.  "Encontraron seis cajas que contenían 41 piezas de cuernos de rinoceronte, envueltas en papel carbón, de aluminio y tela", informaron las autoridades oficiales en un comunicado. Le sugerimos: Parar comercio de pangolines: la clave para minimizar pandemias "Advertimos a quienes están implicados en actividades criminales que no escatimaremos esfuerzos para combatir actos delictivos, que privan a las generaciones venideras del placer de disfrutar de la belleza de la naturaleza", dijo Edward Kieswetter, comisario del fisco. En 2019, 594 rinocerontes fueron muertos para hacerse con sus cuernos en Sudáfrica, país que alberga al 80% de ejemplares de esta especie.