La primera gran megaobra es la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) Salitre, que se encargará de sanear las descargas del norte de la ciudad, dando un gran alivio al río el próximo año 2021 cuando la planta ya esté funcionando en un 100 por ciento. El lugar donde está ubicada esta planta ubicada al noroccidente de Bogotá fue rellenado por 1,5 millones de metros cúbicos de toda clase de residuos y basuras. Era un botadero a cielo abierto conocido como El Cortijo. Si bien con los años dejó de recibir basuras, lo que ya se encontraba en el lugar, generó una contaminación silenciosa.
Actualmente la PTAR Salitre trata el agua residual de más de 2,3 millones de personas del norte de Bogotá. Foto: Nicolás Acevedo. Ya en 2017, todo ese material empezó a removerse par dar paso a la primera megaobra que les cambiará la cara a las aguas del río Bogotá a su paso por la capital del país: la ampliación de la PTAR Salitre, con una inversión de 450 millones de dólares, aportados por la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) y el Banco Mundial. Desde el año 2000, la PTAR Salitre original está funcionando y trata alrededor de siete litros por segundo de aguas residuales que vienen de más de 2,3 millones de habitantes del norte de Bogotá. Puede leer: Un costeño que trabaja por salvar los humedales del río Bogotá Con la ampliación, esta planta tendrá la capacidad de tratar siete metros cúbicos de agua residual por segundo, para devolverla al río Bogotá casi saneada en su totalidad. También impedirá que 450 toneladas mensuales de basura lleguen al río. “Con esta ampliación, el agua pasará por un proceso de desinfección, que quitará basuras, sólidos en suspensión, carga orgánica en un 98 por ciento. Utilizando tecnologías de lodos activos con desinfección, lo que permitirá que el agua sirva para las actividades agropecuarias” dijo Aníbal Acosta, director del Fondo de Inversiones de la CAR. ¿Cómo funcionará?
Cuando la PTAR Salitre esté funcionando al 100 por ciento, impedirá que 450 toneladas mensuales de basura lleguen al río. Foto: Nicolás Acevedo. Las aguas residuales, al llegar a la PTAR Salitre, entrarán a una infraestructura rectangular de captación, donde serán retenidos y removidos los sedimentos, grasas, arenas y residuos de gran tamaño. Una vez retirados los sedimentos, las aguas residuales entrarán en seis clarificadores primarios, donde el agua irá moviéndose lentamente para que los cúmulos de materia orgánica queden depositados en el fondo. Allí serán extraídon todo el material flotante y os lodos primarios. Luego, el agua pasará a 12 tanques de aireación que contarán con reactores biológicos, que utilizan bacterias con capacidad de asimilar la materia orgánica y los nutrientes disueltos en el agua residual. Le puede interesar: Más de $1,3 billones fueron aprobados para proteger el ambiente en Bogotá Después de estos dos procesos de limpieza, el agua quedará clara. Luego ingresará a su etapa final el cual es un sistema de cloración que mata los patógenos: una gran piscina con cloro. Por último el agua saldrá de la PTAR hacía el río Bogotá en unas mejores condiciones, no óptimas para consumo humano, pero sí para riego de cultivos y actividades pecuarias. Por otra parte los lodos extraídos serán enviados a ocho digestores, que los transformarán en biosólidos. Altas temperaturas matarán las bacterias y patógenos y saldrá como resultado un gas, que pasará a unos generadores de energía. Todo este proceso tendrá un tiempo estimado de 16 horas. Contigencia por coronavirus Actualmente por la covid-19 que ha obligado a millones de personas a estar en cuarentena para evitar la propagación del virus, obligó a que las 2.000 personas que trabajan en las obras de ampliación de la PTAR Salitre estén haciendo teletrabajo o en vacaciones. Por lo que las obras quedaron suspendidas desde el 25 de marzo pasado, informó la CAR. Por su parte Acosta dijo que cerca de 150 trabajadores de la PTAR Salitre retomarán las labores en la obra, bajo protocolos estrictos de bioseguridad. “Cada uno de estos trabajadores se les practicó la prueba de la covid-19”, contó el funcionario. Por otra parte Acosta explicó que en una segunda etapa, adaptándose a las medidas tomadas por el Gobierno nacional, de una paulatina apertura del sector de la construcción, se irán integrando los demás trabajadores. PTAR Canoas Para complementar la descontaminación de las aguas del río Bogotá, la CAR tiene la mira puesta en la construcción de la PTAR Canoas, que se encargará de tratar las aguas residuales generadas por el sur de la ciudad y Soacha: unas 7,3 millones de personas. Con una inversión de 4,5 billones de pesos, Soacha será la ubicación de esta planta, que se convertirá en la más grande de Colombia y la quinta de América Latina. Canoas tratará 16 metros cúbicos de agua residual por segundo: el equivalente a llenar una piscina olímpica cada dos minutos. Además tendrá la capacidad de generar 690 toneladas de biosólidos diarios.
Estos son los diseños de lo que sería la PTAR Canoas, que tratará el agua residual de la población del sur de Bogotá y de Soacha. Render: EAAB. Según los diseños de ingeniería de detalle de Canoas, adelantados por Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB), el tratamiento de aguas residuales será realizado en dos fases. Las descargas irán por medio del interceptor Tunjuelo-Canoas ubicado a 40 metros de profundidad, hasta la estación elevadora Canoas, donde los grandes residuos y desechos sólidos serán retirados en rejillas y coladores. De ahí las aguas contaminadas pasarán por una zona de cribado fino, donde varias rejaas extraerán más residuos y los transportaran a una banda que los llevará a un contenedor, luego, las descargas ingresarán a seis desarenadores. Le sugerimos leer: Secretaría de Ambiente denuncia nuevas quemas y talas en parque Entrenubes Las aguas residuales seguirán a los sedimentarios primarios:16 piscinas circulares donde los sólidos en suspensión serán precipitados al fondo y conducidos por barredoras a la parte central. La segunda etapa inicia en la zona de reactores biológicos, piscinas rectangulares donde se mantendrán las actividades biológicas en niveles adecuados. Las aguas pasarán a 16 sedimentadores secundarios, donde serán sometidas a una segunda clarificación. Finalmente ingresarán a unos tanques de desinfección con hipoclorito líquido. “Canoas será 2,2 veces más grande que la PTAR Salitre, también contará con un tratamiento secundario de desinfección. El proyecto está en cierre financiero, es decir que ya contamos con los recursos económicos para hacerlo realidad. Estimamos que la obras pueden durar cinco años hasta 2025, para empezar a funcionar, ciento por ciento en 2026, dijo el director del Fondo de Inversiones de la CAR. Con los recursos de Canoas sobre la mesa, el paso a seguir será iniciar un proceso de licitación. Según la EAAB, ya fueron culminamos los diseños de ingeniería de detalle para el tratamiento primario y se están desarrollando los de tratamiento secundario. "El biogás generado en el tratamiento de Canoas, al igual que en Salitre, será reutilizado para generar cerca del 32 por ciento de la demanda de energía necesaria para su funcionamiento". Más información en: https://ptarsalitre.com.co/Este es un contenido periodístico de la Alianza Grupo Río Bogotá: un proyecto social y ambiental de la Fundación Coca-Cola, el Banco de Bogotá del Grupo Aval, el consorcio PTAR Salitre y la Fundación SEMANA para posicionar en la agenda nacional la importancia y potencial de la cuenca del río Bogotá y sensibilizar a los ciudadanos en torno a la recuperación y cuidado del río más importante de la sabana.