La cucaracha es un insecto que siempre ha sido relacionado con la falta de higiene, por esta razón sorprende un reciente descubrimiento del Instituto de Biología de Células Madre y Medicina Regenerativa de India que indica que una de la soluciones al hambre en el mundo podría estar en la leche que producen estos animales.Esta leche, que la cucaracha usa para alimentar a sus crías, sería cuatro veces más nutritiva que la leche de vaca por lo que se convierte de manera automática en una de las posibilidades más cercanas de mejorar la vida de 795? millones de personas en el mundo, que según el Programa Mundial de Alimentos de la ONU carecen de una alimentación básica.El equipo de investigación constituido por expertos de diversos países (EE.UU., Japón, Canadá, Francia e India) asegura al interior de la cucaracha del Pacífico (Diploptera Punctate) se encuentran cristales de leche ricos en proteínas, grasas, azúcares y todos los aminoácidos esenciales. (Vea: La ciencia de los alimentos)Lo complicado del asunto es que el proceso de producción de la leche seria caótico, ya que no sería nada rentable ordeñar millones de cucarachas. Para esto los académicos ya tienen una solución, sintetizar la secuencia genética del alimento para su producción en un laboratorio. Así se aislaría el gen de la proteína encontrada en la leche de las cucarachas y se produciría en cubas microbiológicas a través de un sistema de levaduras.Sin embargo, muchos se preguntarán ¿por qué tanto ahínco en conseguir producir en masa esta leche?, la respuesta radica en que esta leche tiene unas propiedades magnificas para tratar la desnutrición gracias a que goza de un proceso de liberación lenta y gradual de las proteínas. “Si te gusta la comida rica en calorías, de digestión gradual y que sea completa, esa es la opción”, aseguró el líder del proyecto, Subramanian Ramaswamy, al Times de India.Lo que en principio podría parecer desagradable e inverosímil, está a punto de materializarse. Un insecto que de entrada genera repulsión puede ser la clave para acabar con el hambre en el mundo, gracias a una ‘superleche’ que quizás es la responsable de que este animal sea el único capaz de sobrevivir a un holocausto nuclear.