* Este es un contenido periodístico de la Alianza Grupo Río Bogotá: un proyecto social y ambiental de la Fundación Coca-Cola, el Banco de Bogotá del Grupo Aval, el consorcio PTAR Salitre y la Fundación SEMANA para posicionar en la agenda nacional la importancia y potencial de la cuenca del río Bogotá y sensibilizar a los ciudadanos en torno a la recuperación y cuidado del río más importante de la sabana. En 100 kilómetros de la cuenca media del río Bogotá, entre la Universidad de la Sabana en Chía y las compuertas de Alicachín en Soacha, varias cámaras graban los atentados diarios que recibe el afluente sagrado de los muiscas, golpes que van desde escombros, basuras y vertimientos hasta tala de árboles y quemas a cielo abierto. Se trata del sistema de monitoreo BochiCAR de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), conformado por 14 estaciones o nodos con cámaras de última tecnología que cubren un radio de cinco kilómetros y las cuales cuentan con un alcance de hasta un kilómetro y medio. Le puede interesar: “El río Bogotá será monitoreado cada tres kilómetros”: director de la CAR BochiCAR permite identificar con detalle las placas de los vehículos que arrojan escombros en el afluente y los rostros de los malhechores que lo maltratan, imágenes que son enviadas de forma virtual a un centro de control ubicado en las instalaciones de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) Salitre.
La CAR monitorea durante las 24 horas del día, el estado de la cuenca media del río Bogotá. Foto: Nicolás Acevedo Ortiz. Este sistema hace parte de la Plataforma de Seguimiento, Evaluación y Control Ambiental (Pescar) de la CAR, que monitorea los impactos ambientales en un área de aproximadamente 240.000 hectáreas del departamento de Cundinamarca. Le puede interesar: El reencuentro con la naturaleza de 40 bogotanos después de la cuarentena El hallazgo más reciente detectado por la autoridad ambiental fue dentro de la zona de manejo y preservación ambiental del río Bogotá en la localidad de Suba, donde fueron identificadas tres personas realizando una quema de cable a cielo abierto para la extracción de cobre.
Tres personas fueron detenidas por realizar quemas a cielo abierto en la ronda del río Bogotá. Foto: CAR. “De acuerdo con la información suministrada por el personal de la Policía, entidad que apoya la plataforma de seguimiento, estas personas lograron extraer aproximadamente dos kilogramos de cobre a través de la quema sobre un área de tres metros cuadrados alrededor del río, un área de conservación y protección ambiental”, dijo Alberto Acero, director operativo de evaluación, seguimiento y control ambiental de la CAR. Según Acero, los capturados quedaron a disposición de la SIJIN. “Estamos a la espera que un fiscal determine cuál será su proceso por el delito de contaminación ambiental. Una resolución del Ministerio de Ambiente indica que las quemas a cielo abierto están prohibidas, salvo las controladas en actividades agrícolas y mineras, actividades que pueden generan emisiones atmosféricas y contaminantes que afectan a los recursos aire, suelo y agua y a la salud humana”.
La capital del país es la gran protagonista en la contaminación del río Bogotá. Foto: CAR. Las cámaras de las plataformas de la CAR han evidenciado en promedio 16 quemas a cielo abierto por mes en la cuenca media del río Bogotá, “seguimiento con el que se ha hecho un trabajo articulado con los organismos judiciales para poner freno a quienes realizan este tipo de acciones”, manifestó el funcionario. Le puede interesar: Más de la mitad de los ríos urbanos de Bogotá tiene mala calidad de agua Las quemas a cielo abierto, especialmente de cable robado para la obtención de cobre, y la disposición ilegal de residuos, son los atentados más recurrentes en la cuenca media del río Bogotá, donde además el afluente recibe en promedio 690 toneladas de carga contaminante por parte de los habitantes.
Las personas capturadas quedaron a disposición de la SIJIN. Foto: CAR. Ojos en el río Alicachín, Chucua, PTAR Canoas, Tabaco, Tunjuelo, San Bernardino, Porvenir, Fontibón, Zona Franca, PTAR Salitre, Tuna, Las Mercedes, Chicú y Universidad la Sabana, son las 14 estaciones del sistema BochiCAR, las cuales están entrelazadas unas con las otras y tienen una capacidad para almacenar grabaciones de hasta seis meses. Le puede interesar: EN VIDEO: El cambio extremo del sector sur del humedal La Vaca Estas estaciones funcionan las 24 horas del día y graban los impactos ambientales que sufre el río en su paso por municipios de Soacha, Chía, Cota, Mosquera y Funza, y las localidades bogotanas de Suba, Engativá, Kennedy, Fontibón y Bosa.
14 cámaras graban a diario el estado actual del río Bogotá en la cuenca media. Foto: CAR. Estas cámaras envían las imágenes al centro de control de la PTAR Salitre, imágenes que son proyectadas en un videowall conformado por ocho pantallas unificadas, cada una de 50 pulgadas. Cada vez que es registrada una infracción ambiental, funcionarios de la CAR coordinan operativos con las autoridades policivas para lograr capturar a los verdugos del río Bogotá. Desde finales de 2018, cuando arrancó el funcionamiento de BochiCAR, la entidad ha registrado vertimientos, captaciones ilegales de agua, bombeos desde carrotanques, arrojo de escombros, quemas y hasta animales muertos.
Suba es una de las localidades que más registra quemas a cielo abierto en la ronda del río Bogotá. Foto: CAR.