Hace 20 años observábamos cómo gran parte de los países en el mundo hacían la implementación de las IFRS y los cambios en procesos y procedimientos que esto generaba en las compañías. Hace 11, partimos en el viaje de las NCIF y de las NIAS en Colombia, y en los últimos 5 años observamos cómo la profesión contable comenzó a preocuparse y a hablar constantemente de innovación. No es un misterio que ha representado un gran reto para la profesión. El mercado tiene múltiples ejemplos de cómo negocios han sido desplazados o liquidados por ideas innovadoras. En este sentido, si hablamos de innovación en la profesión contable, nos referimos a: Innovar no necesariamente se trata de digitalización. Se puede innovar a través de la prestación de nuevos servicios o a través de los mismos servicios, pero con diferenciales en el mercado. El mercado día a día requiere que el contador preste servicios que vayan a la velocidad de los negocios, hoy hablamos de criptomonedas, de contratos de arrendamientos, de instrumentos financieros en un ambiente financiero cada vez más complejo y se hace necesario que los preparadores de información puedan asesorar a los encargados del gobierno en cómo determinadas decisiones afectan la posición financiera de una entidad. Por otra parte, los auditores o aseguradores de la información están en el centro de atención ya que el mercado exige que cada vez se brinde mayor calidad en sus trabajos e informes, a la vez que las entidades esperan entender con mayor profundidad los negocios y las expectativas de los encargados del gobierno corporativo. Se puede prestar un servicio diferenciador o innovador si se atienden estas expectativas. Atender este reto sin duda reflejaría que el contador público está llamado a liderar en las diferentes empresas del país y no solamente a ser un preparador de registro contables, es un reto muy interesante si así lo asumimos. Información no financiera sobre la financiera. El contador público está en capacidad de prestar servicios de preparación y presentación de información no financiera, como lo pueden ser: reportes integrados, informes de sostenibilidad, entre otros, el pasado llevó a que el contador se enfocara únicamente en la información financiera pero la evolución de los mercados y los requerimientos de los stakeholders (partes interesadas) dan cada vez mayor peso a la información no financiera. No se puede perder de vista estas necesidades del mercado. Asimismo, los aseguradores de información (auditores) juegan un rol muy importante al brindar confianza sobre esta información no financiera. Desarrollar y madurar estos servicios es innovar y hacerlo es fortalecer la profesión contable en Colombia, por lo cual podemos obtener una ventaja competitiva si entendemos estas nuevas expectativas del mercado global y colombiano. Por último, pero no menos importante, está la innovación a través de la digitalización. Cada vez es más frecuente escuchar que hay empresas interesadas en robotizar áreas contables, asimismo no somos ajenos a la terminología de dataanalytics (análisis de datos), datamining (minería de datos), business intelligence (inteligencia de negocios) etc., los contadores púbicos no pueden ver en la digitalización una amenaza de la profesión, todo lo contrario es un llamado de atención a profesionalizar cada vez más el rol, a proveer mayor valor a las organizaciones y a ser más eficientes en el desarrollo del trabajo. La digitalización se convierte en herramientas y mejoras de procesos que van en pro de la mejora de las funciones propias de los preparadores de información financiera y no financiera y también para los aseguradores de dicha información.
Para los contadores públicos la innovación dejó de ser optativa, se vuelve una obligación, pero en ningún momento puede verse como una amenaza. Todo lo contrario, se trata de una oportunidad para transformar la profesión, una oportunidad muy valiosa para que el mercado colombiano conozca la importancia de las funciones que se desarrollan como: preparadores y auditores de información financiera y no financiera, tributaristas, contadores de costos, financieros y en los diferentes servicios que se ofrecen como contadores públicos. La clave está en entender y aceptar el reto y con base en esto afrontar esta transformación de manera exitosa. *Diego Fernando Quijano es socio líder de auditoría de BDO en Colombia