El texto instó a las compañías energéticas a hacer más para limitar el uso de agua en todos los aspectos, desde sistemas de refrigeración de las centrales térmicas al riego de cultivos para producir biocombustibles. "La demanda de energía y agua potable aumentará significativamente en las próximas décadas", dijeron las agencias de la ONU en el informe mundial de desarrollo del agua. "Este incremento supondrá grandes desafíos y afectará a los recursos en casi todas las regiones", añadió. Hacia 2030, el mundo necesitará un 40 por ciento más de agua y un 50 por ciento más de energía que en la actualidad, según el texto. El agua se está viendo bajo presión por factores como el aumento poblacional, la contaminación y las sequías, inundaciones y olas de calor vinculadas con el calentamiento global. En todo el mundo, unos 770 millones de los 7.000 millones de personas carecen de acceso a agua potable, dijo el informe. Y el sector energético representa aproximadamente un 15 por ciento del agua retirada de fuentes como ríos, lagos y acuíferos. "Esta interdependencia exige una cooperación bastante mejor" entre agua y energía, dijo Irina Bokova, directora general de la UNESCO. El informe lamentó la falta de influencia del sector acuífero frente a lo que calificó de la "gran bofetada política" de la energía. El 22 de marzo es el día mundial del agua en el calendario de la ONU. ARENAS MOVEDIZAS Toda la producción energética usa agua a menudo como refrigerante, dijo la ONU. Algo menos se emplea en energías solar y eólica. Las represas hidroeléctricas fueron a veces construidas pensando poco en los usuarios de agua, según el informe, que pidió además cautela respecto a los biocombustibles, en parte por el agua usada para el riego. "China e India, los dos grandes productores y consumidores mundiales de muchas materias primas agrícolas, afrontan ya graves limitaciones en la producción agrícola, habiendo iniciado los dos programas para impulsar la producción de biocombustibles", dijo. Zafar Adeel, director del Instituto de Agua, Medioambiente y Salud de la Universidad de la ONU, dijo que los gobiernos deberían replantearse las ayudas tanto para la energía como para el agua. "La fijación del precio del agua es mucho más difícil" que la energía, dijo en una comunicación telefónica. La Asamblea General de la ONU declaró el agua un derecho humano en 2010, reforzando los argumentos de que los suministros básicos deberían ser gratuitos. Reuters/D.com