En muchas partes del mundo, tomar whisky escocés es sinónimo de gustos refinados, o por lo menos de billeteras amplias. Degustarlo es considerado un símbolo de estatus para muchos de sus aficionados.De acuerdo con la Asociación de Whisky Escocés (SWA por sus siglas en inglés) las exportaciones del producto bajaron 7% en 2014 y llegaron a US$5.830 millones, poniendo fin a una expansión que llevaba cerca de una década.Los datos indican que buena parte de los resultados decepcionantes se debe a menores exportaciones a Estados Unidos, el mayor comprador de la bebida en el mundo. (El consumo estadounidense de whisky escocés bajó en 9% y llegó a US$1.104 millones).La baja en el consumo se nota no solo en el valor de las exportaciones sino en el volumen. Las exportaciones globales cayeron en 3% hasta llegar a 1.190 millones de botellas.SWA atribuye el menor interés en el whisky a "condiciones económicas más débiles y volatilidad política" en algunos mercados. Pero insiste en que está optimista en el futuro, especialmente por las tendencias que muestran algunos mercados emergentes.“En Asia, Taiwán vio como las importaciones de whisky escocés saltaron en un 36% hasta llegar a los US$290 millones, especialmente impulsadas por la popularidad de las variedades single malt (whisky puro de malta)”, destacan.También subió el consumo en India, donde las importaciones de la bebida escocesa llegaron a US$131 millones, un aumento del 29% pese a la imposición de aranceles del 150%.Más trago pero más baratoEn América Latina, el retrato es más complejo. En México, por ejemplo, se consumió más whisky pero más barato.Las exportaciones de la bebida escocesa a ese país aumentaron 5% por volumen, hasta alcanzar los 42,8 millones de botellas, pero su valor total cayó en 10%. Algo similar se vio en Brasil, donde el volumen se mantuvo estable pero el valor cayó en 20%.En cambio, en Emiratos Árabes Unidos, el consumo tuvo una tendencia expansiva, con las importaciones de whisky subiendo de valor en un 27%.En Singapur, otro núcleo importante del comercio del whisky, las ventas se vinieron abajo en 39%, hasta llegar a los US$300 millones.Los expertos atribuyen esta caída en parte a la actual campaña en favor de la austeridad en China, el destino final de buena parte del whisky escocés enviado del Reino Unido a Singapur.Las exportaciones directas a China también cayeron en 23% a US$57 millones. China representa el mercado número 26 en importancia para el whisky.Irónicamente, Francia, la tierra del vino por excelencia, es la que más consume whisky escocés por volumen y la segunda nación medida por el valor de sus compras de la bebida.Las exportaciones a ese país subieron 2% y llegan a US$659 millones.España, que es el quinto mercado en importancia, compró whisky escocés por valor de US$246 milllones, una caída de 8% frente al año anterior.BBC Mundo