Un video que circula en redes sociales se hizo viral en Francia y causó indignación en los internautas, quienes cuestionaron a las autoridades parisinas sobre su respeto a las medidas de prevención para frenar el número de casos de covid-19 en este país.

En las imágenes se pueden ver cerca de 20 policías franceses en una fiesta clandestina realizada en la comisaría de Aubervilliers, todos ellos sin tapabocas y sin respetar las normas de distanciamiento social.

Agentes de la policía francesa aseguran el puente que conduce a la Torre Eiffel, el miércoles 23 de septiembre de 2020 en París. La policía de París ha bloqueado el área alrededor de la Torre Eiffel después de una amenaza de bomba telefónica. (Foto AP / Michel Euler) | Foto: Copyright 2020 The Associated Press. All rights reserved.

El evento se habría realizado el pasado 22 de enero y, de acuerdo con la información que circula en las redes, se trataría de la despedida a un teniente de la estación.

Sin embargo, los usuarios de internet aseguraron que este comportamiento y este tipo de actividades dejan en una muy mala posición a los miembros de la autoridad que deberían ser ejemplo de buenas prácticas en medio de la pandemia.

En el video se puede ver a los uniformados cantando y bailando la famosa Macarena mientras incumplen varias de las normas establecidas para combatir el coronavirus en este país.

La jefatura de policía de París anunció que se aplicarán sanciones contra los asistentes a la celebración, mensaje que fue transmitido por el ministro del interior, Gerald Darmanin, en su cuenta de Twitter.

Debido al aumento de los contagios en Francia, las medidas de restricción se han endurecido en las últimas semanas por lo que la fiesta de los oficiales es un mal mensaje para quienes sí están acatando las normas de bioseguridad.

De acuerdo con lo decretado por el gobierno francés, las fiestas y otro tipo de reuniones están prohibidas en todas las instalaciones policiales, también se exige el uso del tapabocas en las estaciones y el distanciamiento social.

Además, la Policía francesa también limitó el número de personas que pueden estar en la salas de las estaciones policiales para poder reducir el número de contagios en las estaciones.

En Francia también está establecido el toque de queda desde las seis de la tarde y por ende todas las fiestas luego de esa hora están prohibidas. De hecho, desde la imposición del toque de queda se han entregado miles de multas a quienes han organizado fiestas o reuniones ilegales.

Los usuarios de redes sociales han pedido que se cumpla el mismo protocolo con los oficiales que organizaron la reunión y que todos, sin importar su rango social, cumplan con las normas establecidas.

Los policías que estuvieron presentes en el evento se pronunciaron sobre el tema y manifestaron que “El hecho de que seamos una estación de Policía no significa que haya una diferencia entre nosotros y el resto de la población”, dijeron.

Además, afirmaron que no hacen momentos de convivencia y que todas las reuniones que hacen en las instalaciones policiales cumplen con las recomendaciones generales de salud, aunque es algo que ponen en duda los usuarios de las redes al ver otro tipo de comportamiento en el video difundido en Twitter.

Un oficial de policía francés revisa a una mujer cerca de la Asamblea Nacional. Francia levantó un bloqueo impuesto el 30 de octubre, pero comenzó un nuevo toque de queda el martes a las 20:00, tiempo local, ya que las infecciones aún son altas. Foto: AP / Francois Mori. | Foto: AFP or licensors

De todas las opiniones que han surgido en redes, se destaca la de un usuario que afirmó que “el problema no es que festejen, el problema es que son ellos quienes hacen cumplir las reglas, prohibiendo que otros hagan lo mismo mediante multas. Aquí hay egoísmo”.

Esta es no es la primera vez que los policías de Aubervilliers se ven involucrados en un escándalo. En noviembre del año pasado, los agentes obligaron a un grupo de migrantes a deambular por las calles de París con el fin de que no instalaran carpas en la vía pública, lo que generó la indignación de los usuarios en internet, quienes calificaron la acción como inhumana.