Una de estas nuevas formas inversión son las criptomonedas, que cada vez se hacen más populares entre el público inversionista por la posibilidad de recibir grandes ganancias, pero también entre los estafadores por su negocio poco regulado. En una columna publicada en Noticias Argentinas, Gabriel Zurdo, director ejecutivo de BTR Consulting, explicó que solo en los primeros seis meses del año los estafadores ganaron US$24 millones en bitcoines (solo lo que se ha registrado). Según Zurdo, actualmente entre las modalidades de estafa más frecuentes se cuentan 9, entre ellas, las ICO fraudulentas, phishing, cloud mining y billeteras falsas. Estas son las modalidades de engaño más frecuentes según lo explicado por el experto en su columna: ICO fraudulentas: Las Ofertas Iniciales de Moneda (ICO) se convirtieron rápidamente en el método preferido de financiamiento para gran parte de las start-ups del criptomundo. Según Zurdo, dado que cualquier persona puede lanzar una ICO, muchos estafadores arman esquemas fradulentos y escapan con los fondos. Phishing: Consiste en la suplantación de identidad de una autoridad, empresa o incluso de alguna persona, con el fin de engañar a la víctima para que esta revele su información confidencial. De esta forma, el atacante podrá acceder a sus cuentas o carteras y robar los fondos. Intercambios P2P: Según Zurdo, se trata del simple intercambio de criptomonedas directamente entre las partes involucradas, sin la ayuda de algún intermediario de confianza, como una casa de cambio. "Regalos" en las redes sociales: Esta estafa es bastante similar al phishing, pues se trata de utilizar cuentas impostoras en las redes para engañar a los usuarios. La diferencia es que a través de estas cuentas se solicitan los fondos directamente en lugar de tan solo la información confidencial, bajo la promesa de que se recibirá una recompensa mucho mayor después de transferidos. Cloud Mining: Este es un método con el que alguna empresa ofrece contratos o acciones a clientes interesados en obtener ganancias con la creación de criptomonedas. Aunque esto no es por sí mismo una estafa, es fácil engañar a los usuarios para comprar estos contratos, ofreciendo ganancias irreales cuando ni siquiera poseen los equipos necesarios para minar, agregó el experto. Billeteras falsas. Esquemas pump and dump: La táctica consiste en inflar artificialmente el precio de una criptomoneda muy poco conocida mediante la compra masiva coordinada y la promoción con anuncios fraudulentos. Una vez que el precio alcanza cierto nivel, se da una venta masiva para recoger ganancias, que vuelve a hacer caer el valor de la criptomoneda. Esquemas piramidales. Casas de cambio falsas.
Además, según el experto en su columna, “para fines de 2020 los estafadores generarán al menos US$50 millones en ingresos anuales con solo una de las más de 2.500 monedas virtuales que existen”.