Desde noviembre, los mercados emergentes y la mayoría de sectores en los desarrollados se han fortalecido pese a las noticias sobre el segundo brote del coronavirus que ha llevado a nuevas cuarentenas en el mundo o la difícil transición presidencial en Estados Unidos. Felipe Campos, director de investigaciones de Alianza Valores, explica que el fenómeno “es una combinación que arranca el año pasado con el anuncio de las vacunas y su efectividad y la elección de los demócratas". "Ahora más recientemente con que los demócratas ganaron el Senado [de Estados Unidos] se refuerza un poco la expectativa de que vengan paquetes de ayuda en febrero o marzo, adicionales al que se acaba de firmar, y eso trae una expectativa de crecimiento económico bien fuerte”, apuntó. Por su parte, Daniel Escobar, analista independiente CFA, señala que la tendencia “no es lo que habría esperado. Un proceso traumático de transición de poder en EE. UU., una pandemia con riesgo de desbordar los sistemas de salud en varios países, en adición a las nuevas medidas restrictivas para contenerla me habrían hecho considerar una posible corrección temporal para luego retomar la tendencia alcista, pero parece que los inversionistas siguen mirando más el futuro que el presente y sus implicaciones”. Lea también: Tres salidas a la bolsa moverán el mercado estadounidense en enero El dólar también es un factor que impulsa a los mercados, su debilidad en los últimos meses genera un crecimiento en los mercados emergentes. Por ejemplo, para Colombia la debilidad del dólar significa un menor costo de la deuda externa en moneda extranjera, un factor que también evalúan los inversionistas. A los estímulos en política fiscal para evitar una caída más fuerte del consumo en los países como consecuencia de las cuarentenas y la pérdida de empleos se suman las medidas en política monetaria. Los bancos centrales del mundo han bajado sus tasas de interés a mínimos históricos y han anunciado compras de deuda privada y pública con medidas que antes eran inexistentes. Pero esta combinación de políticas, explica Juan David Ballén, director de análisis y estrategia de Casa de Bolsa, genera expectativas de un incremento en la inflación. “Los activos están descontando un pico inflacionario mientras que la economía está débil otro punto es el tema de si esto es sostenible, eso está más difícil responder porque también tiene que ver con el movimiento de los bancos centrales porque están imprimiendo dinero y una forma que nunca antes habían hecho entonces realmente no se sabe hasta dónde pueden llegar”, agrega Ballén. Puede interesarle: Fondos de pensiones: los mayores compradores de acciones en 2020 Por su parte, Alejandro Reyes, economista principal de BBVA Research en Colombia, señala que “es importante destacar que a diferencia de lo ocurrido en 2009-2011, cuando se inundó el mundo de liquidez también, tenemos una apuesta más decidida desde el lado fiscal para realizar proyectos que puedan traducirse en actividad y ello hace que los riesgos sean menores, en principio, de una sobrevalorización de activos, pero sigue habiendo algún riesgo de recalentamiento, eventualmente, de la economía global”. Reyes añade que el recalentamiento de la economía “es algo que posiblemente no pase en el corto plazo y se deba estar atento a las señales vía inflación del momento oportuno para moderar los estímulos, pero por el momento son riesgos que se pueden manejar”. Estas expectativas de una mayor inflación ya se están reflejando también en los Tesoros de Estados Unidos a través de una desvalorización ante el incremento de sus tasas. Esto por las expectativas de que con una mayor inflación, aunque baja, se genere un alza en las tasas de interés de los bancos centrales. Y con una mayor inflación, así como una eventual toma de ganancias de los inversionistas, el mercado debería iniciar una tendencia de corrección a la baja. En ese sentido, Ballén agrega que “todo se arregla si la FED en algún momento anuncia un control de curvas, es decir empieza a comprar Tesoros para que no se valoricen tanto o anuncia una compra directa de Tesoros de largo plazo porque ahora está comprando solo a corto plazo, entonces el control de curvas genera expectativa de que no se suban las tasas de largo plazo”. Recomendado: ¿Por qué las bolsas llegaron a récords en 2020 con la economía hundiéndose?