Antes de la inauguración, el equipo de rugby femenino de Colombia era el que más cantaba, más celebraba, el que más disfrutaba el momento, ese mismo que nació como un sueño en medio del desierto, que surgió como un oasis cuando apenas algunos sabían de la existencia de este deporte en el país. Ahora, es el primero que lleva a una atleta de La Guajira a unos Juegos Olímpicos y además, aparte del fútbol, es el único deporte de conjunto que estará vestido del tricolor nacional en Río-2016.Uno de los que persiguió esta idea fue precisamente el presidente de la Federación Colombiana de Rugby, Andrés Gómez. Este antioqueño que entró al rugby como preparador físico fue escalando y aprendiendo cada vez más, enamorándose al punto de unirse con otros precursores que soñaban con oficializarlo. Así empezó una gestión que duró casi varios años hasta que se creó Fecorugby en marzo de 2011, como lo muestra su estatuto. Con esto en pie, esa pasión que durante los años 90 y el nuevo milenio había sido introducida en calles y universidades encontró una posibilidad de profesionalismo.Le puede interesar: Olímpicos y las historia de los derrotadosAllí aparecieron los ya creados Tucanes y Tucanas, apodo que los precursores del rugby en Colombia le dieron a los practicantes de ese deporte pensando en el ave típica del país, que ahora será aún más representativa en los brazos y piernas de las jugadores que en Brasil esperan volar. De hecho, el sueño de llegar más alto se dio con un triunfo contra Argentina en Mar del Plata en 2011. "Allí supe que teníamos opciones de llegar a unos Juegos Olímpicos con un proceso", reconoció Gómez.Un trabajo serio, con un proyecto claro, sirvió para cada vez ganar más credibilidad de la Federación Mundial de Rugby (World Rugby) para incrementar su apoyo. "Empezamos un recurso pequeño en 2012 y lo incrementamos en un 500 y 600 por ciento", cuenta el directivo que lleva dos periodos en el cargo. "Tenemos unas muy buenas relaciones con la Federación Mundial de Rugby, se les presentó proyecto, se hizo seguimiento y nos tienen confianza", añade, al afirmar que de parte de Coldeportes también han recibido cada vez más respaldo, pues ese organismo valora mucho la claridad y transparencia de su proceso.También puede leer: En videos, así fue el comienzo de Jossimar Calvo en Río-2016El camino fue largo y complicado pues el rival a vencer, Argentina, los venía derrotando en los diferentes enfrentamientos, luego de esa victoria en Mar del Plata en 2011. Sin embargo, el equipo liderado por la capitana Alejandra Betancur y compuesto en total por 8 jugadoras de Antioquia, dos de Bogotá, una del Valle y una de La Guajira (Catherine Medina). "A estas niñas, al jugador de rugby colombiano y al colombiano le gusta hacerse a pulso, esa es nuestra historia, la del colombiano verraco hecho a pulso", asegura Gomez acerca del glorioso grupo en el que están la veterana Guadalupe de la Cruz López junto a Cindy Solangie Delgado Buitrago, Maria Camila Lopera, Katherinne Paola Medina, Nicole Jocelin Avecedo, Sharon Acevedo, Estefanía Ramírez, Isabel Romero Benítez, Laura Isabel González, Laura Andrea García Ortiz y Catalina Ramírez Talero."Es soñar con una pequeña posibilidad y uno se encarga de contruir sueño. Yo siempre fui enamorado de ese sueño y era una entre 99 posibilidades y se pudo", dice y añade que ahora las jugadoras reciben, desde julio, una mensualidad de aproximadamente 1‘800.000 pesos entre los dos salarios mínimos con los que aporta Coldeportes y lo que les dan sus institutos con la idea de que se dediquen de lleno al rugby. De hecho, la propia federación, que antes manejaba una inversión de aproximadamente 200 millones de pesos con miras a los Juegos tuvo entre 900 y mil millones de pesos que les sirvieron para foguearse en giras de adaptación en Dublin, Uruguay, Dubai, Rio de Janeiro, Sao Paulo, Atlanta y para su preparación en Guarne.Le recomendamos: Triunfo del boxeo colombiano, primer golpe en RíoSin embargo, saben que en estos Juegos se encontrarán rivales más veteranos y por eso buscarán realizar tareas muy concretas, pero ante todo dejar el nombre del país en alto. "Este equipo está por encima de cualquier cosa pues tiene honor y gloria. Dejamos el pellejo pegado en la cancha. Los momentos de la vida hay que vivenciarlos y entender que hay equipos superiores, pero hay que hacer aprendizaje", advierte el directivo que explica que si alcanzan su meta de quedar en el noveno o décimo lugar podrán tener una financiación importante porque quedarían rankeados a nivel mundial, es decir, la de estar jugando permanentemente con los mejores siempre invitados, con todo pago por la federación mundial. Enfrentarán de entrada a Australia, el actual número 1 del ranking mundial, y a Estados Unidos, número seis, en su primera jornada, pero eso hace parte del proceso, uno hecho a pulso y que hace a estas Tucanas soñar con volar cada vez más alto.