La actriz mexicana Kate del Castillo se hizo célebre por protagonizar la exitosa producción de TV La reina del sur, cuya trama giraba en torno a una humilde mujer que se enamora de uno de los capos más temidos de México y termina convertida en una poderosa mafiosa. La historia se desarrollaba, en parte, en Sinaloa, aquel lugar mítico controlado en parte por grupos de narcotraficantes, especialmente por el ‘Chapo’ Guzmán. Como se sabe, Guzmán protagonizó una cinematográfica fuga el sábado anterior, situación que puso en jaque a las autoridades mexicanas. Con su fuga han salido a relucir historias en torno a la vida del narcotraficante. Una de ellas es el episodio de esta actriz, que en el 2012 divulgó a través de su cuenta de Twitter una llamativa carta en la que escribió polémicas frases que dieron de qué hablar. “Hoy creo más en el Chapo Guzmán que en los gobiernos que me esconden verdades aunque sean dolorosas, quienes esconden la cura para el cáncer, el sida, etc., para su propio beneficio y riqueza”, escribió la actriz. Semana.com reproduce la carta en su totalidad y con sus errores. Una muestra más del descontento de decenas de mexicanos frente a la situación de su país. "Hoy quiero decir lo que pienso y pues al que le acomode bien. Hoy 2012 me divierto más. Escucho más la música que me gusta como @ChavelaVargas @manuchao @Calle13Oficial @BuikaMusic leo @lydiacachosi #Galeano #sabines #Neruda ·#carlosfuentes y dejo de escuchar a los políticos. Y es que ya me cansé de hacer lo que no quiero. Muchas veces he sido feliz pero no me di cuenta. Amo. Me amo. No creo en la manipulación, me tiene adormecida. El gobierno. La religión. La política. Los medios. La sociedad. La suciedad. Los que me juzgan y señalan pero también me exigen y me aplauden. No creo en el matrimonio, creo en el amor. No creo en la idea de que debo estar con alguien por el resto de mi vida, eso sólo me crea culpa e infelicidad cuando he fracasado, de hecho, no creo en el fracaso, creo en salir adelante, en tomar decisiones buenas o malas, creo en cambiar de opinión tan seguido como sea necesario. (…) No creo en la Iglesia y en cualquier caso, no creo en la religión, pero sí creo en Dios puesto que lo veo en mis ojos a través del espejo todos los días. No creo en las enfermedades porque he aprendido como sus curas me han sido negadas, escondidas. No creo en ninguna institución o ley que se dedican a aterrorizarme y quitarme mi dinero. No creo en al Papa ni en el Vaticano con todo y su riqueza como tampoco creo en los sacerdotes ya que creo que el ser humano debe disfrutar del amor carnal, del sexo y de preferencia sin esconderse ni lastimando a nadie. Creo, a pesar de todo lo que acabo de escribir, en la raza humana, porque amo, odio, me arrepiento, me equivoco, lastimo, ayudo, siento, ‘fracaso’, lloro, sufro, envidio, tengo dolores profundos, tengo sexo, tengo sueños, fantasías, deseos, pido ayuda, recibo, doy, lucho, salgo adelante, me olvido, me enfurezco, me río, espero, soy paciente, soy impaciente, aguanto? estoy viva y por eso agradezco a Dios todos los días, por ser quien soy, bien o mal. Hoy creo más en el Chapo Guzmán que en los gobiernos que me esconden verdades aunque sean dolorosas, quienes esconden la cura para el cáncer, el sida, etc. para su propio beneficio y riqueza. Sr. Chapo, ¿no estaría padre que empezara a traficar con el bien, con las curas para las enfermedades, con comida para los niños de la calle, con alcohol para los asilos de ancianos que no los dejan pasar sus últimos años haciendo lo que se les pegue la reverenda chingada; con traficar con políticos corruptos y no con mujeres y niños que terminan como esclavos; con quemar todos esos "puteros" donde la mujer no vale más que una cajetilla de cigarros, sin oferta no hay demanda? Anímese, don, sería usted el héroe de héroes, trafiquemos con amor, usted sabe cómo. ‘La vida es un negocio, lo único que cambia es la mercancía’ ¿que no?”