La historia del primer jean en Colombia está relacionada estrechamente con la fundación de la empresa Lec Lee, liderada por la familia Caicedo desde hace 77 años. Hoy la empresa ha tenido que reinventarse para continuar sus labores, apostándole a la fabricación de prendas y trajes de bioseguridad para hacer frente a la crisis sanitaria ocasionada por la covid-19. Desde su fundación, la compañía se ha convertido en un referente histórico en el desarrollo de la confección industrial en el país, durante más de tres generaciones. De hecho, ha alcanzado el establecimiento de 74 tiendas a nivel nacional. Si bien la empresa ha atravesado diferentes coyunturas económicas y comerciales durante tantas décadas de labores, los efectos negativos ocasionados por la pandemia fueron inesperados, porque implicaron el cierre de todas sus tiendas desde marzo. Esto afectó considerablemente el flujo de caja de la empresa. Lea también: Un 80% de los consumidores en Latinoamérica planea reducir sus gastos Por esta razón, la empresa le hace un llamado al Gobierno para que proteja la industria nacional en un momento crítico como este. Al menos 600 empleados directos, 400 indirectos y sus familias hacen parte de la nómina de Lec Lee, que espera mantener su trabajo y volver a sus labores tradicionales. “Lo que hoy pedimos al Gobierno es lo que desde un comienzo nuestra compañía ha venido haciendo, que es proteger a nuestros trabajadores y mantener el empleo a pesar de las condiciones tan desiguales que se mueven en esta industria, en donde un gran porcentaje está regido por la informalidad”, dice a Dinero Gustavo Caicedo, vicepresidente de Operaciones de Lec Lee e hijo del fundador Luis Eduardo Caicedo.
Crédito: Cortesía de Lec Lee. En ese sentido, uno de los retos más importantes para el Gobierno tiene que ver con concentrar esfuerzos en la protección de la industria nacional y acompañar a compañías formales como Lec Lee para que logren mantener su fuerza laboral. Para ello, las facilidades y el fortalecimiento de los apoyos económicos a través del sistema financiero serán fundamentales. Lea también: Gremios exponen la crisis económica de sus sectores en sesión del Senado Lec Lee beneficia a 1.000 familias de trabajadores, pues el 95 % del personal es cabeza de familia. “Abrimos una nueva línea de producción con el apoyo de nuestro departamento de diseño, con el cual hemos podido desarrollar un portafolio de ropa adecuada para la protección de la salud y, más específicamente, para el control de contagio”, añadió Gustavo Caicedo sobre la manera en que la empresa ha tenido que reinventarse para seguir funcionando. Esa iniciativa ha permitido que la empresa mantenga activo un porcentaje del 40% de su personal en planta, mientras las autoridades autorizan la reapertura de las tiendas. Aunque el Gobierno ya está preparando un plan para la reapertura de centros comerciales y locales comerciales a partir de junio, la empresa prevé que la reactivación económica será lenta. “Tenemos empleados que llevan más de tres décadas trabajando con nosotros y, en este momento, a pesar de la crisis, no hemos despedido a nadie. Además, a lo largo de nuestra historia hemos contribuido a la pensión de más de 10.000 trabajadores”, puntualizó Caicedo.