Fernando Jaramillo es un investigador de la Universidad de Estocolmo que recientemente terminó sus estudios de doctorado en geografía y quien cuenta con varias publicaciones en revistas científicas como Science Magazine y Nature Climate Change. En junio pasado Jaramillo publicó un artículo en la revista Science en la que afirma que el consumo actual de agua en el planeta probablemente ya ha pasado su límite planetario. El científico le explicó a Semana Sostenible de qué se trata la teoría de los límites planetarios y qué significa en términos prácticos haber propasado varios de ellos. Semana Sostenible: En su artículo ‘Planetary boundaries: Guiding human development on a changing planet’ recientemente publicado en la Revista Science usted dice que el consumo de agua ya ha pasado el límite adecuado para la supervivencia de la humanidad en la tierra. ¿Qué son los límites planetarios?Fernando Jaramillo: En 2009, Johan Rockström del Centro de Resiliencia de Estocolmo definió los nueve límites planetarios que definen las características óptimas necesarias para que la humanidad prospere en el planeta. Este estudio fue publicado en la revista Nature y demostró en ese entonces que tres de los nueve límites planetarios ya habían sido superados por los humanos: clima, biodiversidad y uso de Nitrógeno. En este estudio el consumo humano de agua estaba dentro de su límite planetario. En febrero de este año se publicó la actualización de estos límites planetarios, en la revista Science. En esta actualización, se demuestra como ya son cuatro los límites planetarios sobrepasados, pero el consumo humano de agua es otra vez mostrado muy por debajo de su límite planetario.Esto contrasta con los cálculos que mi colega Georgia Destouni y yo ya habíamos publicado en la revista Nature Climate Change en la que demostramos como la humanidad ya puede haber sobrepasado el límite planetario del agua si se tienen en cuenta todas las actividades humanas, todos los usos del agua, y nuestras recientes investigaciones de consumo de agua por desarrollos hidroeléctricos y agricultura. Nuestra publicación en Science explica por qué y cómo se ha sobrepasado este límite y abre el debate sobre los actuales cálculos mundiales de uso del agua usados por gobiernos y agencias multilaterales.Semana Sostenible: ¿En qué consisten esos cálculos?Fernando Jaramillo: Los autores de estos límites planetarios no han tenido en cuenta todos los usos del agua y siguen refiriéndose a cálculos hechos hace casi 20 años. El límite para el uso sostenible del agua en el mundo se estableció en 4.000 kilómetros cúbicos por año. Nosotros demostramos que, a contrario de lo que se creía, el uso relacionado al agua que se pierde por evapotranspiración en los embalses para suministro del líquido, generación de energía y usos agrícolas, es mucho mayor que el consumo directo de agua potable y uso industrial. La evapotranspiración comprende el agua que se pierde por evaporación en la superficie y por la transpiración de las plantas. Los embalses y la agricultura entonces alteran el ciclo hidrológico de las cuencas en las que están localizados devolviendo más agua a la atmósfera y reduciendo así el agua que corre sobre la superficie en los ríos y las quebradas. Si se tienen en cuenta estos tipos de consumo de agua, el uso total de agua humano mundial llega ya a 4.664 kilómetros cúbicos de agua por año, superando claramente el límite planetario.Semana Sostenible: ¿Qué implica que este límite se haya superado?Fernando Jaramillo: Estos límites son muy abstractos, no creo que auguren el fin de la tierra o algo por el estilo. Sin embargo, son una alerta de lo que le estamos haciendo como humanos a la tierra en todos los frentes y de los riesgos que estamos tomando. Esta noticia debe servir para dar más conciencia acerca de los niveles insostenibles de consumo del agua en algunas regiones del planeta. También, para incrementar el dinero para investigar las consecuencias del consumo actual de agua por cuenta de nosotros los humanos.Semana Sostenible: ¿De dónde surgió la idea de esta investigación?Fernando Jaramillo: Antes de hacer mi doctorado trabajaba coordinando Estudios de Impacto Ambiental (EIA) en consultoría en Colombia, especialmente de proyectos hidroeléctricos, y de ahí me surgió la duda de cuáles serían las implicaciones para el ciclo hidrológico de los cambios al uso del suelo y del agua. Creo que los EIA de proyectos que comprenden el almacenamiento de grandes volúmenes de agua en embalses o relacionados a grandes cambios en la cobertura vegetal deberían también tener en cuenta el impacto sobre el clima y el ciclo hidrológico. Esto no solo en Colombia sino en el resto del mundo, ya que estos impactos hasta ahora empiezan a tomar la importancia que merecen.Publicación en Science de acceso gratuito:Jaramillo, F., and Destouni, G. (2015). Comment on “Planetary boundaries: Guiding human development on a changing planet.” Science 348, 1217–1217. doi: 10.1126/science.aaa9629