La pandemia del coronavirus tiene en veremos el avistamiento de las ballenas jorobadas o yubartas, un espectáculo natural donde los turistas tienen la oportunidad de ver los saltos de las adultas con sus pequeñas crías en las aguas del Pacífico colombiano. Todos los años, entre los meses de junio y noviembre, más de 3.000 ballenas jorobadas que alcanzan a medir hasta 16 metros de largo y a pesar 30 toneladas, visitan el territorio nacional en plena época reproductiva. Los habitantes de sitios como Buenaventura y Bahía Solano, dependen económicamente de los turistas que llegan a conocer las ballenas.

El Gobierno aún no decide cuándo regresará el turismo a las áreas protegidas. Foto: Paola Sánchez (PNN). El Parque Nacional Natural Uramba Bahía Málaga, 47.000 hectáreas ubicadas en Buenaventura, es uno de los mayores epicentros de avistamientos en el país. Cada año, este espectáculo natural recibe en promedio 25.000 turistas nacionales e internacionales, actividad que por el momento no está permitida por la covid-19. Le puede interesar: Así se prepara Buenaventura para recibir a las ballenas jorobadas Ante la imposibilidad de recibir visitantes, el equipo de guardaparques del área protegida trabaja arduamente en la construcción de un documento normativo para el avistamiento responsable de las ballenas jorobadas, acción que permitirá tener lista la reglamentación para cuando el Gobierno nacional autorice la reapertura del ecoturismo.  

Más de 3.000 ballenas jorobadas visitan Colombia cada año. Foto: Paola Sánchez (PNN). “El avistamiento de ballenas ha motivado al área protegida a fortalecer los lazos con las comunidades, entidades de control y centros de investigación para desarrollar esta actividad de manera articulada y que permita la conservación de la especie. Cuando regrese el turismo, ya contarán con protocolos de bioseguridad para la contingencia de la pandemia, atendiendo los lineamientos establecidos por el Gobierno”; informó Parques Nacionales Naturales (PNN). Le puede interesar: Ballenas jorobadas atraen a turistas en su paso por el Pacífico El documento con los protocolos es construido de manera conjunta con la Secretaría de Turismo de la Gobernación del Valle, la Capitanía de Puerto y Estación de Guardacostas de Buenaventura, la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca (CVC), la Secretaría de Turismo del Distrito de Buenaventura y el Grupo de Ecología Animal de la Universidad del Valle. 

Habitantes de sitios como Buenaventura y Bahía Solano dependen del turismo derivado de los avistamientos de ballenas. Foto: Paola Sánchez (PNN).  “Con ellos se viene analizando la eficacia y efectividad de las normas que ya existen y que regulan las actividades turísticas y marítimas, especialmente aquellas que tienen relación con la conservación de los ecosistemas y de la ballena yubarta o jorobada”, expresó PNN. Todas las entidades han manifestado su compromiso por establecer acciones concretas que buscan mejorar el control marítimo, puertos, playas y mar, todo en procura de la seguridad de las personas y de la biodiversidad.  “Asimismo, esta labor busca trabajar mancomunadamente con las comunidades para el cumplimiento de las medidas, quienes son actores importantes para el desarrollo armonioso del avistamiento. Es indispensable que conozcan las recomendaciones o sugerencias en la reactivación del turismo”, dijo Parques Nacionales.

Las ballenas jorobadas están en el Pacífico colombiano desde junio. Foto: Paola Sánchez (PNN). Cuando esté listo el documento, PNN lo socializará en los seis consejos comunitarios que hacen parte del área protegida en un espacio de retroalimentación, aprobación y articulación de los diferentes actores sociales, para así desarrollar el proceso de avistamiento de ballenas de manera articulada y coordinada. Le puede interesar: Se anticipó la llegada de las jorobadas al Pacífico colombiano Por ahora, los guardaparques trabajan con las comunidades locales para fomentar una cultura de responsabilidad en torno a los avistamientos, cumpliendo con los protocolos de seguridad y las recomendaciones generales del ecoturismo. “En este  territorio de conservación natural se está promoviendo el cuidado de los ecosistemas marinos y costeros de la bahía como un soporte fundamental de la biodiversidad”.

Los avistamientos de ballenas por ahora no tienen luz verde por la pandemia. Foto: Paola Sánchez (PNN). Desde que empezó la cuarentena, Parques Nacionales Naturales ordenó el cierre y prohibió el ingreso de visitantes y operadores turísticos a las distintas áreas protegidas con vocación ecoturística, como Uramba Bahía Málaga.  “Las actividades ecoturísticas retornarán a la normalidad una vez que el Gobierno lo ordene y se cumplan con los protocolos de bioseguridad aprobados por las autoridades departamentales, locales y las respectivas comunidades”.