Colgado en la rama de un árbol, sobre una vía veredal del municipio de Cabrera en Cundinamarca, fue dejado el cadáver de un tigrillo lanudo (leopardus tigrinus).  Quienes lo asesinaron tenían la firme intención de que quien transitara por allí, vieran el atroz hecho. La escena, que parece sacada de una película de terror, generó no solo el repudio de las autoridades, sino también de los habitantes del sector, una zona boscosa en la que también hace presencia el oso andino o de anteojos, el puma y otros felinos como este y en la que, debido a su importancia ecosistémica, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) realiza constantes monitoreo de fauna.

El cadáver del tigrillo fue puesto intencionalmente en un árbol que da sobre una carretera. Foto: CAR Cundinamarca.  La corporación pudo establecer que en la zona hay personas dedicadas a la cacería indiscriminada y horas antes de conocerse la muerte de este mamífero, fueron escuchados varios disparos, razón por la cual este hecho se le atribuye cazadores furtivos.  La CAR, además de rechazar y lamentar este tipo de hechos que atentan contra la biodiversidad del territorio, interpuso la respectiva denuncia penal ante la Fiscalía seccional de Fusagasugá y, adicionalmente, está ofreciendo una recompensa de dos millones de pesos para quien entregue la información exacta que permita dar con el paradero de los responsables de este atentado contra la fauna silvestre.  Le puede interesar: Cazadores de fauna estarían detrás de los incendios en la Ciénaga de Santa Marta "Invitamos a la comunidad a denunciar a quien haya cometido este vil crimen contra el medioambiente y la fauna, pero a la vez a informar sobre quienes atenten contra la flora, el aire y el suelo. Somos su autoridad ambiental y tenemos capacidad de respuesta para atender cada una de las quejas que tengan", indicó Fernando Sanabria, director de la CAR Cundinamarca. 

La CAR ofreció dos millones de pesos de recompensa para quienes suministren información que permita dar con los asesinos del tigrillo. Foto: CAR Cundinamarca.  La autoridad ambiental pidió que cayera todo el peso de la ley sobre quienes cometen este tipo de actos. Adicionalmente, dio a conocer sobre amenazas en contra de sus funcionarios en la zona. "A este hecho se suma un agravante y es que en pasadas ocasiones se han conocido panfletos en el lugar, donde se advierte sobre no querer la presencia de funcionarios de la CAR", informó la corporación. Le sugerimos:  EN VIDEO: Registran primeros felinos yaguarundí en área protegida del Caquetá El leopardo tigre (Leopardus tigrinus) es un felino de hábitos nocturnos propio de los bosques tropicales, ubicados entre los 600 y 4.300 metros sobre el nivel de mar. Alcanza una longitud de 39 a 78 centímetros y una altura entre 22 y 30 centímetros. Puede vivir 17 años en un entorno natural y 20 en cautiverio. Se alimenta principalmente de roedores y pájaros.  Su estado de conservación es vulnerable en el listado de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, debido a la franca reducción poblacional.