El déficit de lluvias que se viene registrando en el país desde el pasado mes de enero sigue preocupando al sector energético del país. Solo en abril, mes conocido como el de las lluvias, se produjo un promedio histórico mucho menor de precipitaciones en comparación con años anteriores. Según el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), en la región Andina llueve, en promedio, entre 300 y 400 milímetros en abril, pero este año la cifra no alcanzó ni a la mitad, lo que demuestra la problemática. Le sugerimos: En riesgo suministro de energía para fin de año si no llueve ahora Una cifra que corroboró la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) que, a través de su Red Hidrometeorológica, logró establecer que desde agosto del año anterior se viene registrando una reducción en las precipitaciones en su jurisdicción, situación que ha persistido durante este 2020. Según esa autoridad ambiental, en abril llovió un 40% menos de lo que debía haberse registrado en este período. Entre tanto, en mayo, aunque se presentó un leve aumento de las precipitaciones, se mantuvieron las condiciones deficitarias, especialmente en las regiones Caribe y Orinoquia, donde hubo una disminución de las lluvias en cerca del 70%, mientras que en algunos sectores de la región Andina la disminución estuvo entre un 40 y 50 por ciento.
En la región Andina las lluvias estuvieron por debajo de los nieveles histórico esperados en abril. Foto: Pixabay. Lo grave es que este fenómeno seguirá registrándose durante junio y julio. Yolanda González, directora del Ideam, sostuvo que esta situación sucede debido a que las temporadas secas se están acentuando cada vez más. Esto, como consecuencia de los cambios en los patrones de las lluvias que están cambiando y se están demorando en llegar. La funcionaria explicó que solo hasta julio las lluvias en regiones como la Orinoquia y la Amazonia podrían estar por encima de lo normal. Sin embargo, el instituto no se descarta la presencia de eventos fuertes y extremos en sectores de las regiones Pacífica y Andina. "Para las regiones Caribe y Orinoquia se espera que estas condiciones de lluvias se generalicen en los siguientes días. Para la región Caribe, las lluvias mantendrán su condición de déficit. En la región de Orinoquia se espera que las precipitaciones de esta temporada se manifiesten con eventos extremos de grandes aguaceros", informó el Ideam. Lea también: Bajó el nivel de agua de los embalses que abastecen a la sabana de Bogotá Esta situación ha hecho que los embalses registren niveles mínimos que no se alcanzaban desde 1998. Así lo dio a conocer la Asociación Colombiana de Grandes Consumidores de Energía Industriales y Comerciales (Asoenergía), que advirtió que las reservas hídricas en los 23 embalses que existen en país siguen presentando cifras críticas. En la actualidad las reservas hídricas se encuentran en un 33,67%, mientras que en 1998, el embalse agregado registró un mínimo de 31,2%. Los embalses que menor reservas hídricas tienen en este momento son los que se ubican en la zona oriental, con un 28%, siendo el de La Esmeralda, en Boyacá, el que registra los niveles más bajos con un 12,23% de volumen útil.
El embalse La Esmeralda fue el primero utilizado en Colombia para generar energía hídrica. Cuando se seca deja incomunicadas a cerca de 1.000 personas que viven en cinco veredas del casco urbano del municipio de Macanal (Boyacá). Foto:Esteban Vega/Semana. En Antioquia las reservas hídricas se encuentran en un 33,25%. En ese sector del país los embalses de Miraflores y Riogrande 2, son los que el presentan mayor déficit con 4,25% y 9,06% de volumen útil, respectivamente. Entre tanto, en la zona centro las reservas hídricas se encuentran en un 36.69%. Las presas que menor niveles presentan son Topocoro, con un 22,43% de volumen útil; el Agregado Bogotá, con un 34,88%; Prado, con un 43,76%, y El Quimbo, con 49,19%. En el Valle las reservas están en un 40,81%. Allí el embalse Alto Anchicayá es el que presenta mayor reducción de volumen útil, con un 16,36%, mientras que en la región Caribe las reservas se encuentran en un 50,21%, debido a que el embalse Urrá 1 cuenta con 50,21% de volumen útil.
Nivel de embalses en Colombia. Fuente: XM. Según la empresa XM, operadora del Sistema Interconectado Nacional, es necesario realizar una revisión permanente de la evolución de los aportes al sistema y una adecuada gestión de los recursos. Un informe publicado esta semana por esa firma estableció, además, que luego del inicio de operaciones de sectores como la construcción y las manufacturas, la demanda ha aumentado en 6% a diferencia del periodo de los demás días de aislamiento obligatorio. Le recomendamos: Hidroeléctricas: la delgada línea entre el desarrollo y el conflicto Ante ese panorama, la incertidumbre sobre el suministro de energía en el verano de 2021 y el fantasma del apagón que se ha generado, Sandra Fonseca, directora ejecutiva de Asoenergía, sostuvo que es indispensable que se tomen desde ya todas las precauciones para tener la energía suficiente para abastecer la demanda a futuro.
El Sisga es uno de los principales embalses que existen en el centro-oriente del país. Foto: Nicolás Acevedo Ortiz/Alianza Grupo Río Bogotá La líder gremial manifestó que, si bien es prematuro hablar de racionamiento, era muy preocupantes los reportes sobre el nivel de los embalses que venían dando los generadores hidráulicos y más aún, con el aumento del consumo que se espera se dará con la recuperación gradual de más sectores económicos. En el informe publicado por esa asociación esta semana se determinó que durante la cuarentena se presentó una eventual caída en el consumo de energía. Por su parte, la Comisión de Regulación de Energía y Gas (CREG) presentó para comentarios la resolución que establece medidas para evitar racionamientos a futuro. A través de esta normatividad se le ordena, por ejemplo, a las empresas que usan agua para la generación de energía, aumentar los aportes hídricos tras la caída en el nivel de los embalses en mínimos históricos. Le puede interesar: Represas y embalses: grandes amenazas para los ríos Estas recomendaciones se realizan con el objetivo de garantizar la seguridad energética del país, en especial para el 2021. El déficit de agua en los embalses llevará a un aumento en la participación de las térmicas, que pasarían de generar un 30% de energía a un 50%, lo que redundará en un aumento de la contaminación. Así las cosas, el llamado de las autoridades es a ahorrar agua y energía.