La palma de aceite ha sido catalogada como uno de los principales motores de la deforestación a nivel mundial, un cultivo que le brinda materia prima a grandes empresas para la elaboración de diversos productos como cosméticos, jabones, galletas, biocombustibles, tintas, margarinas, detergentes y chocolates.Según “El Estado de los Bosques del Mundo 2020”, documento elaborado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la agricultura comercial a gran escala, en especial el pastoreo extensivo y el cultivo de soja y palma de aceite, es la causa de deforestación de mayor prevalencia. Le sugerimos: Nuevo escarabajo miniatura fue descubierto para la ciencia en Colombia “La expansión agrícola sigue siendo la principal causa de deforestación y fragmentación del bosque, con su consecuente pérdida de biodiversidad asociada. La agricultura comercial a gran escala, principalmente la cría de ganado vacuno y los cultivos de palma de aceite y soja, fue la causa del 40 por ciento de la deforestación de bosques tropicales entre 2000 y 2010”, cita el informe.
Colombia es el primer productor de aceite de palma en América. Foto: Jhon Barros (Instituto Humboldt). Colombia es el cuarto productor de aceite de palma en el mundo, después de Indonesia, Malasia y Tailandia, y es el primero en América. “La palma de aceite es la oleaginosa más productiva del planeta. Actualmente, Colombia cuenta con 559.583 hectáreas de palma en 161 municipios de 21 departamentos”, revela una infografía de la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite (Fedepalma).La Orinoquia colombiana es una de las regiones donde más se encuentra este cultivo. Según Fedepalma, el departamento del Meta suma 161.737 hectáreas de palma de aceite sembrada en 21 municipios. “En 2019, la producción de aceite de palma crudo en Meta alcanzó 458.677 toneladas (30,03 por ciento de la producción nacional)”. Le puede interesar: Colombia logra segunda reproducción de escarabajos en laboratorioPor su parte, Casanare cuenta con 57.794 hectáreas de palma de aceite sembradas en 10 municipios. Fedepalma informó que la producción de este aceite crudo en 2019 alcanzó 169.975 toneladas, 11,1 por ciento de la producción nacional. Escarabajos y palma Ante la alta presencia de la palma de aceite en los Llanos Orientales, siete científicos de Colombia, Reino Unido y Noruega se dieron a la tarea de evaluar los impactos de este cultivo sobre unos invertebrados de los que casi nadie habla: los escarabajos estercoleros o coprófagos (Coleoptera: Scarabaeidae, Scarabaeinae).En el mundo existen unas 6.000 especies de escarabajos coprófagos, cerca de 400 registradas para Colombia. Según Claudia Medina Uribe, investigadora del Instituto Humboldt que participó en este análisis, el número de especies de estos escarabajos en la Orinoquia colombiana es alto, dada la heterogeneidad de ecosistemas de esta región del país.
161 municipios de 21 departamentos de Colombia albergan cultivos de palma de aceite. Foto: Jhon Barros (Instituto Humboldt). “Hemos registrado 105 especies de ocho tribus de la subfamilia Scarabaeinae en diversas áreas de la región, como las de transición entre la selva amazónica y las planicies orinoquenses, además de las zonas andinas”, aseguró la investigadora del programa Ciencias de la Biodiversidad del Instituto Humboldt.Estos escarabajos cuentan con funciones importantes para los ecosistemas, como la dispersión secundaria de semillas, la aireación del suelo y el ciclado de nutrientes, así como el control de organismos parásitos. Le recomendamos: Ya inició el Apocalipsis de los insectos“Estas especies procesan el excremento de vertebrados y lo entierran para su alimentación y nidificación, haciendo así aportes de nutrientes y manteniendo la salud del suelo; también favorecen la dispersión de semillas. Este grupo de escarabajos, además, son indicadores de la presencia de otros grupos taxonómicos, especialmente mamíferos”, informó Medina.
En la Orinoquia colombiana hay registros de por lo menos 105 especies de escarabajos coprófagos. Foto: Claudia Medina (Instituto Humboldt). Para los siete investigadores, la expansión de la palma de aceite a expensas de los bosques genera pérdidas de biodiversidad en varios taxones, como es el caso de estos escarabajos, algo que se torna aún más preocupante ante la transformación de las coberturas vegetales de la Orinoquia.“Los Llanos, región compuesta en gran parte por pastizales para ganado con parches fragmentados de bosque y sabana natural, se ha identificado como un área prioritaria para futuras plantaciones de palma de aceite”, revela un artículo científico publicado por los investigadores en la revista Journal of Environmental Management. Puede leer: Tres animales cachacos que sufren por el rechazo ciudadanoEn los paisajes agrícolas, el mantenimiento de la diversidad de invertebrados mejora la producción de cultivos mediante la prestación de importantes servicios de polinización, control de plagas y reciclaje de nutrientes.
Los científicos evaluaron tres sitios de los Llanos Orientales de los departamentos del Meta y Cundinamarca. Foto: Claudia Medina (Instituto Humboldt). “Mantener una diversidad de rasgos funcionales e historias de vida de las especies es vital para preservar las funciones del ecosistema y reforzar la resiliencia. El cambio de uso de la tierra puede provocar un filtrado ambiental, alterar la composición de la comunidad y reducir la diversidad funcional”, afirman los expertos.Al revisar varios documentos y otros estudios científicos, los siete investigadores encontraron que la deforestación causada por la palma de aceite en otras partes del mundo, causó reducciones en la diversidad funcional de los escarabajos coprófagos en Borneo y las abejas orquídeas en la Amazonia brasileña. Lea también: Dos nuevas especies de insectos fueron registradas en la Quebrada La ViejaTambién evidenciaron que la conversión de bosques a pastos para ganado en los Andes colombianos disminuye la diversidad de los escarabajos coprófagos. “Sin embargo, se desconoce cómo el reemplazo de las tierras agrícolas de bajo rendimiento por palma de aceite, afecta la diversidad funcional y la composición de los invertebrados”.
Los expertos instalaron 159 trampas de caída en las tres zonas exploradas para encontrar a los escarabajos coprófagos. Fotos: Claudia Medina (Instituto Humboldt). Explorando los Llanos Robert W. Davies (Universidad de Sheffield); David P. Edwards (Universidad de Sheffield); Claudia A. Medina Uribe (Instituto Humboldt); Johann Cárdenas Bautista (Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia); Torbjørn Haugaasen (Universidad Noruega de Ciencias de la Vida); James J. Gilroy (Universidad de East Anglia); y Felicity A. Edwards (Universidad de Sheffield), se adentraron en la extensa Orinoquia para estudiar la diversidad de este grupo de escarabajos.Su principal propósito era establecer si promover la expansión del cultivo de palma de aceite a expensas de tierras agrícolas de bajo rendimiento, es una alternativa que permite conservar la diversidad funcional de los escarabajos estercoleros de los Llanos Orientales de Colombia.
Entre enero y mayo de 2013, los científicos evaluaron las poblaciones de escarabajos en los departamentos del Meta y Cundinamarca. Foto: Claudia Medina (Instituto Humboldt). “La preservación de la diversidad funcional de invertebrados dentro de las tierras agrícolas y cultivadas, se puede lograr conservando los hábitats naturales adyacentes; sin embargo, esto no se ha probado en los trópicos. En Malasia, por ejemplo, la diversidad taxonómica de escarabajos y hormigas en las plantaciones de palma no se vio afectada por la presencia de bosques de galerías, aunque la diversidad taxonómica disminuyó con el aumento de la distancia a las franjas de bosques de galería”. Le sugerimos: Mamíferos de Colombia estarían en riesgo si no se limitan cultivos de palma de aceiteEntre enero y mayo de 2013, una temporada relativamente seca, los científicos estuvieron en tres sitios de los Llanos Orientales de los departamentos del Meta y Cundinamarca, áreas separadas entre los 22 y 27 kilómetros y con coberturas de pastizales, parches de bosque húmedo y seco y grandes plantaciones de palma de aceite.Las plantaciones de palma de aceite fueron contiguas, cubriendo un área combinada de aproximadamente 968, 1.177 y 5.698 hectáreas. Todas las parcelas muestreadas tenían palmas establecidas de edad fructífera, entre los cinco y 28 años.
Los escarabajos con tamaños pequeños-medianos son más abundantes en el bosque que en las zonas de palma de aceite y pastos. Fotos: Claudia Medina (Instituto Humboldt). “Por su parte, los bosques remanentes estaban compuestos por bosques de galería y fragmentos de bosque aislados, incluyendo comunidades de morichales dominadas por la palma Mauritia flexuosa L. Las zonas de pastoreo de ganado fueron de baja intensidad en pastos mejorados, principalmente con especies africanas del género Brachiaria”, cita el artículo.Para encontrar a los escarabajos coprófagos, los expertos instalaron 159 trampas de caída en las tres zonas exploradas: 54 en las plantaciones de palma, 54 en los pastos para ganado y 51 en los parches de bosque remanente. Le recomendamos: “Solo las acciones colectivas ayudarán a frenar la deforestación”: Justin Adams “Las trampas fueron cebadas con estiércol humano fresco para atraer a la mayoría de las especies. Las muestras se recolectaron cada 24 horas durante cuatro días consecutivos. El borde de la trampa se enterró a nivel del suelo y se llenó parcialmente con detergente líquido sin olor y agua para inmovilizar a los escarabajos. Los especímenes capturados en las muestras, fueron depositados en la Colección Entomológica del Instituto Humboldt”.Los expertos analizaron seis rasgos funcionales de los escarabajos: tamaño corporal, área de las patas delanteras, proporción de las patas delanteras y traseras, comportamiento, actividad diaria y rango de dieta.
Minimizar los efectos de la expansión de cultivos de palma y ganadería sobre la diversidad funcional, es vital para mantener la provisión de servicios del ecosistema. Foto: Claudia Medina (Instituto Humboldt). ¿Qué es posible? Los resultados mostraron que los escarabajos con tamaños pequeños-medianos eran más abundantes en el bosque que en las zonas de palma de aceite y pastos. Por su parte, los más grandes no difirieron mucho entre los cultivos de palma y bosque.Varias especies de escarabajos pequeños, de los géneros Uroxys, Onthophagus y Canthidium, se encuentran en abundancia tanto en el bosque como en la palma, pero fueron escasas en los pastos. Por su parte, las áreas boscosas albergan los escarabajos con mayor tamaño corporal, lo que para los expertos es un hallazgo de suma importancia.
La palma no puede reemplazar los ecosistemas naturales como el bosque de galería, la sabana nativa u otros remanentes de bosque en la región. Foto: Jhon Barros (Instituto Humboldt). “Esto tiene importantes consecuencias funcionales, ya que los escarabajos más grandes eliminan más estiércol y más rápido. La retención de la cobertura boscosa y la vegetación del sotobosque, aumenta la ocupación de mamíferos diurnos y nocturnos, lo que podría explicar la asociación positiva entre la abundancia diurna y generalista de escarabajos y la cobertura boscosa”.El bosque tuvo una abundancia significativamente mayor de escarabajos cavadores que en los pastos. La abundancia de escarabajos rodadores y moradores, no difirió entre ninguno de los tres hábitats. Entre tanto, los escarabajos diurnos y nocturnos fueron más abundantes en los bosques, pero su abundancia en la palma no difirió de los bosques o pastizales.Para los siete científicos, estos datos indican que minimizar los efectos de la expansión de cultivos de palma y ganadería sobre la diversidad funcional, es vital para mantener la provisión de funciones y servicios del ecosistema.
El desarrollo de la palma de aceite a expensas de pastos mejorados para ganado de baja intensidad, conserva la diversidad funcional de los escarabajos coprófagos. Fotos: Claudia Medina (Instituto Humboldt). “Nuestro estudio muestra que permitir el desarrollo futuro de la palma de aceite a expensas de pastos mejorados para ganado de baja intensidad, conserva la diversidad funcional de los escarabajos coprófagos en los Llanos Orientales. Sin embargo, la palma no puede reemplazar los ecosistemas naturales como el bosque de galería, la sabana nativa u otros remanentes de bosque en la región: retener las coberturas de bosques en el paisaje agrícola, mejora la diversidad funcional de las plantaciones de palma”. Puede leer: Cercados por la palma: plantaciones invaden territorios ancestrales Los autores del artículo recalcan que la expansión de la palma aceitera en los Llanos colombianos se puede lograr con efectos mínimos sobre la biodiversidad y la función del ecosistema, mediante el reemplazo de zonas de pastos mejorados para ganado de baja intensidad.“Nuestro estudio indica un papel importante de los parches de bosque remanente en la protección y la difusión de las funciones del ecosistema, lo que subraya la necesidad de protección ambiental en la región. La aceptación de la membresía de la Mesa Redonda para la Palma de Aceite Sostenible (RSPO), que requiere la protección de parcelas de bosque con alto valor de conservación, en combinación con la planificación del paisaje regional, proporciona un impulso para la expansión sostenible”.
Los científicos evidenciaron que es de suma importancia el mantenimiento de la vegetación del sotobosque dentro de las plantaciones de palma para mantener los escarabajos. Foto: Jhon Barros (Instituto Humboldt). Los investigadores proponen un enfoque de gestión de tierras de agricultura mixta, es decir zonas donde el ganado paste bajo palmeras maduras para reducir los problemas asociados y aumentar la abundancia de escarabajos y tasas de eliminación de estiércol. “Pero es de suma importancia el mantenimiento de la vegetación del sotobosque dentro de las plantaciones de palma para mantener los ensamblajes de escarabajos”.La gestión futura de los paisajes de palma de aceite debe exigir anchos mínimos para las franjas de bosques de galería. “Esto maximiza el potencial de los hábitats remanentes para proporcionar un refugio para las especies más vulnerables y al mismo tiempo impulsa la biodiversidad dentro de las tierras agrícolas y la función del ecosistema”, concluyeron los científicos.