En Colombia existen 23 cuencas sedimentarias, de las cuales siete son productoras de petróleo. De ese grupo hace parte el Caguán-Putumayo, que  produce el 2,9% del crudo total del país y es considerada como una de las más atractivas por sus reservas que, según Ecopetrol, rondarían en los 500 millones de barriles, cifra con la que difieren la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) y el Departamento de Geociencias de la Universidad Nacional, que indican que las reservas en esa región serían de 3.000 y 6.000 millones de barriles, respectivamente.  Pese a que los datos varían, lo cierto es que son valores considerados como altos y de gran potencial. Esto implica, también, potenciales riesgos ambientales  y socio-culturales en la zona. 

Un proyecto denominado "Coalición para la promoción de los derechos territoriales de pueblos indígenas amazónicos y la protección del medio ambiente”, realizado por la Organización Nacional de los Pueblos Indígenas de la Amazonía Colombiana, OPIAC, la Asociación Ambiente y Sociedad, AAS, y el Centro de Estudios para la Justicia Social “Tierra Digna”, con el apoyo de Rainforest Foundation Norway, RFN, alertó sobre el traslape de 37 contratos petroleros con 81 resguardos indígenas. Adicionalmente, sobre 26 resguardos que están traslapados con las áreas que están siendo ofertadas por la ANH para la exploración y explotación de petróleo. Le sugerimos: Por la vía jurídica, indígenas de la Sierra Nevada piden protección de sus derechos Según el informe, en la cuenca Caguán-Putumayo, localizada en la región Amazónica, existen 51 contratos para estudiar técnicamente el área (TEA), así como para explorar y explotar petróleo, los cuales están a cargo de 16 empresas nacionales e internacionales. También señala que ya hay áreas definidas como "sin asignar" que estarían disponibles para ser adjudicadas a las empresas que las soliciten y cumplan los procesos y requerimientos. "En las áreas que la ANH determinó como sin asignar o disponibles en la región, se encuentran ubicados 26 resguardos indígenasd los departamentos de Putumayo, Guainía, Caquetá, Guaviare", decía el estudio. 

El informe también destaca que la actividad petrolera ha introducido patrones extractivos en la región que han ocasionado una transformación de los ecosistemas, una dinamización de la colonización y una confrontación social por el reconocimiento y acceso a la tierra. "Es una actividad que va en aumento dado que la región está parcialmente explorada y aún tiene mucho potencial, y existe un interés del gobierno en adquirir mayor información al respecto, tal y como se plantea en el PND, en el programa de consolidación productiva del sector minero", destca.  El estudio previene, además, que con el propósito de facilitar el proceso de asignación de áreas para reactivar la industria y aumentar las reservas de petróleo y gas, la ANH actualizó y activó este año el Proceso Permanente de Asignación de Áreas (PPAA), un modelo para adjudicar áreas de forma directa, permanente y más simple, al igual que para celebrar contratos E&P en las áreas disponibles que la agencia delimite y determine para este fin. "Este proceso ya no se realizará en periodos determinados (cada 1 o 2 años) como se venía haciendo, sino de forma constante. Aunque para 2019, la ANH no ofertó áreas por asignar en la region Amazónica, las compañías tienen la posibilidad de solicitarle a la entidad la incorporación de otras zonas disponibles que sean de su interés, acción que se podrá hacer periódicamente", precisa el informe.   Le recomendamos: Águilas Negras amenazan a indígenas del Pueblo Awá Ante este panorama, el equipo investigador deja, a manera de conclusión, varios interrogantes por resolver, entre los que se encuentran: ¿qué conflictos se están creando o agudizando por los traslapes en los resguardos indígenas en bloques petroleros?; ¿cómo es el proceso cuando el traslape se produce con resguardos indígenas no certificados por el Ministerio del Interior?; ¿se está cumpliendo efectivamente el ejercicio de Consulta Previa frente a estos proyectos?, y ¿se están beneficiando de alguna manera los resguardos indígenas por el desarrollo de estos proyectos en sus territorios?

A nivel mundial, Colombia ocupa el puesto 22 en cuanto a producción, con 853.600 barriles de petróleo por día, mientras que en términos de consumo la casilla 40, con 333.000 barriles por día. En lo referente a reservas se ubica 36, con 1.665.000.000 barriles. Hay que tener en cuenta que una cuenca sedimentaria es una depresión de la corteza terrestre (o forma de cubeta), formada por la actividad tectónica de las placas, en la que se acumulan sedimentos. Si las rocas presentes en la cuenca tienen materia orgánica y se combinan con condiciones adecuadas de profundidad y presión, pueden generarse hidrocarburos.