Según un informe del Banco Mundial (BM) publicado el pasado septiembre, los deshechos generados en el planeta en 2016 alcanzaron los 2.010 millones de toneladas. Según las previsiones del BM, esta cifra se disparará hasta llegar a los 3.400 millones de toneladas en el año 2050. Es decir, que en poco más de tres décadas se generarán casi un 70% más de basura. Le puede interesar: Reciclaje: urge ampliar su implementación en Colombia Los expertos del organismo, que llaman a poner en marcha "medidas urgentes" para frenar esta tendencia, apuntan a la rápida urbanización y el crecimiento de la población como algunas de las causas de este problema. En regiones como el África Subsahariana o Asia Meridional, la cantidad de deshechos en 2050 se triplicará y duplicará, respectivamente.
El uso de plástico es uno de los factores más problemáticos. Foto: AFP vía BBC. Pero en el informe también se señala a factores "especialmente problemáticos" como el plástico, del que en 2016 se generaron 242 millones de toneladas de desechos, cuya adecuada gestión, reutilización y reciclaje son fundamentales para reducir su gran impacto en el medio ambiente. ¿Y en América Latina? ¿Cuánta basura generan los países de la región y cuál será su tendencia en las próximas décadas? La influencia del turimo La tasa media de generación de basuras per cápita en América Latina (en los países cuyo idioma oficial es español o portugués) es de 0,87 kg. al día, lo que supera el promedio mundial fijado en 0,74 kg.
Pero la diferencia es aún mayor si en el mapa de la región se incluyen los países anglófonos del Caribe, la mayoría de los cuales se colocan a la cabeza de generación de residuos y que aumentan la media regional hasta 0,99 kg. Y según la proyección del Banco Mundial, en el año 2050 esa cifra pasará a ser de 1,30 kg. diarios per cápita. Le recomendamos: ¿Está en una relación tóxica?: la ingeniosa campaña de la ONU para ‘terminar‘ con el plástico De hecho, algunos de estos territorios ya muestran cifras hasta tres y cuatro veces superiores como las Islas Vírgenes de Estados Unidos (4,46 kg.) y las Británicas (3,75 kg.).
La gran afluencia de turistas en las Islas Vírgenes de EE.UU. es uno de los motivos de su alta producción de desechos. Foto: GETTY vía BBC. John Morton, especialista en Ambiente Urbano del Banco Mundial y responsable del estudio, califica el caso de las islas como "la peculiaridad de América Latina y el Caribe". En la generación de residuos influye "que tanta población viva en un área tan pequeña y la existencia de actividades comerciales y el turismo", le dice a BBC Mundo. Le sugerimos: Mosquitos transportan partículas microscópicas de plástico por el aire Este último elemento, por ejemplo, es una de las causas que explica la presencia de República Dominicana entre los cinco países que más basura producen en América Latina.
Nivel de ingresos El factor más importante para comprender qué países son los que más y menos basura generan en América Latina, sin embargo, es otro: el nivel de ingresos de sus habitantes. "Si la población tiene más dinero, su consumo será mayor y producirán más desechos", resume Morton. No es, en absoluto, un hecho exclusivo de esta región. En todo el mundo, los países de ingreso alto generan más del 34% de los desechos, pese a que en ellos solo vive el 16% de la población del planeta.
El nivel de ingresos de la población de un país es determinante para que se generen más o menos residuos. Foto: GETTY vía BBC. "En América Latina hay muchos países de ingreso medio-alto, por lo que su generación de basura es mucho mayor que en otros lugares del mundo como África, por ejemplo", subraya el experto. Y esta desigualdad económica dentro de la región, dice Morton, es la que explica que países como México, Chile o Argentina sean los que más deshechos generan frente a la tasa de otros como Guatemala o Bolivia.
La región que menos recicla El informe señala cómo tener sistemas adecuados de gestión de desechos es la base de una economía circular, en la que los productos pueden ser optimizados de modo que sean reutilizados y reciclados. Pero el reciclaje es, precisamente, una de las grandes asignaturas pendientes en América Latina y el Caribe.
El reciclaje es un hábito aún poco extendido en América Latina y el Caribe. Foto: AFP vía BBC. Según los datos del Banco Mundial, esta es la región que menos recicla del mundo: solo un 4,5% de su basura (el promedio del planeta es del 13,5%). Sin embargo, es importante destacar que de nuevo son las islas anglófonas del Caribe —donde el mercado del reciclaje es aún incipiente— las que hacen descender la media en la región. "El reciclaje en América Latina recae sobre todo en el sector informal como las personas que ves recogiendo por la calle", señala Morton.
El mercado de la reutilización o reciclaje informal es habitual en América Latina. Foto: GETTY vía BBC. "Esto añade cierto valor, pero no tiene nada que ver con el gran compromiso público hecho en países de Europa o Japón, donde se puede reciclar hasta el 50 o 60% de la basura". La clave de los desechos de alimentos El experto destaca buenas prácticas como la de Argentina, donde "la demanda pública hizo presión para fomentar el reciclaje como política pública", o Colombia, donde existen programas de pago o recompensa para las personas que reciclan. Algunas de sus recomendaciones para detener esta imparable tendencia al alza en la generación de basura pasan por fomentar el reciclaje, reducir el consumo de plásticos y el de los desechos alimenticios gracias a la educación de la población.
Es recomendable gestionar de manera eficiente los restos de alimentos, que en América Latina y el Caribe suponen más de la mitad de la basura que se genera. Foto:GETTY vía BBC. "Los desechos que más puedes reducir como ser humano son los de comida, que en el caso de América Latina y el Caribe son más del 52% del total y de los que un gran porcentaje acaba en vertederos", le asegura a BBC Mundo el especialista del Banco Mundial. Puede leer: Chile, primer país latinoamericano en prohibir las bolsas de plástico Para hacerlo, recomienda gestionar de manera eficiente los restos de alimentos aprovechando las sobras, llevándolas a un banco de comida o inclusotransformándolos en compost. "Lo que es necesario es un compromiso real, tanto de la población como de los Estados a través de políticas proactivas para gestionar adecuadamente los desechos", concluye.