Semana Sostenible: ¿Por qué tener un centro de desarrollo sostenible para Latinoamérica? Alejandro Gaviria: Esta idea no surge en Colombia. Hay uno en Asia, en África y en China, además de varios capítulos de país. La idea es promover la adopción de la Agenda 2030, sensibilizar a la gente y al sector privado, e incentivar la investigación relacionada, crear redes al respecto. Semana Sostenible: Teniendo en cuenta lo global de la iniciativa, ¿por qué el Centro funciona en una universidad y Colombia se constituye en la sede principal para América Latina y el Caribe? A. G.: Por tres razones. Colombia jugó un papel importante en la conceptualización de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Tuvo un liderazgo que ha reconocido todo el mundo, desde el secretario general de Naciones Unidas hasta los académicos involucrados. En el contexto latinoamericano, nuestro país ejemplifica muy bien los desafíos de los ODS. América Latina se distingue por cinco características en el concierto internacional: la desigualdad, las ciudades, la importancia de la agricultura –esta es una subregión que alimenta al mundo–, los temas de violencia, paz e instituciones. Vea también:Objetivos de Desarrollo Sostenible: todos pasan por el agua Y un tercero, más instrumental, es que este Centro nace como resultado de una donación. Y el donante quiso que estuviera ubicado en nuestro país. Semana Sostenible: El propósito de este Centro es ayudar a los países de Latinoamérica a lograr la Agenda 2030. ¿Cómo estamos frente a la región? A. G.: En algunas dimensiones vamos adelante, en otras somos promedio. En unas semanas vamos a lanzar un índice de seguimiento para la región. Estamos construyendo los indicadores en este momento. Semana Sostenible: En términos operativos, ¿cómo funciona el Centro? A. G.: El Centro es más una plataforma o punto de encuentro. No tenemos un gran número de investigadores afiliados. Lo que hacemos es trabajar con los de toda la región. Promover la investigación mediante convocatorias; la educación en los ODS, con cursos virtuales; y la incidencia, mediante la promoción de trabajo periodístico. En últimas, nos parecemos más a un tanque de pensamiento que a un centro de investigación. Vengo del mundo tecnocrático. En este sentido, pensaba que la función de este Centro era influir en los tomadores de decisiones, quienes diseñan las políticas públicas, pero no. Nuestro objetivo es servir para que la población en general pueda tener una conversación estructurada con evidencias sobre estos temas que nos atañen a todos. Semana Sostenible: Usted toca un tema muy importante, el gobierno. ¿Cómo se van a articular? El Plan Nacional de Desarrollo (PND) no es claro. No hay meta para detener la deforestación. A. G.: El PND tiene una mención desde el comienzo sobre los ODS. Hay un peligro en ese discurso y es que justamente solo se quede en eso. Es una marca atractiva. Hoy está en la boca de todos los políticos y puede hacer parte de las palabras, pero no de la toma de decisiones. Nosotros vamos a hacerle un seguimiento al PND y señalar sus fortalezas, pero también sus debilidades. Estamos dispuestos a trabajar con el gobierno, pero también a mantener nuestra independencia. Asimismo, nos preocupa la deforestación. Semana Sostenible: El sector privado también es fundamental en el logro de los ODS. ¿Cómo va esa conversación? A. G.: La universidad ha venido trabajando desde hace un tiempo con el sector privado. La política de economía circular es fruto de ello. Haremos además una capacitación en el tema para el sector privado. Los ODS no son solo responsabilidad del sector público. Semana Sostenible: ¿Cómo hacer que la gente entienda los ODS y no los vea como un asunto que no les corresponde? A. G.: Son muchos temas, a veces complejos. Pero, en esencia, le interesan a la gente. Estamos, por ejemplo, diseñando una encuesta para medir el apoyo a algunas políticas como los impuestos verdes en América Latina. El cumplimiento de los ODS está asociado con el cambio en los modos de pensamiento y comportamiento. Crear conciencia sobre las demandas, a veces contradictorias, a veces insostenibles, de muchos grupos sociales. Semana Sostenible: ¿Hay objetivos priorizados o se van a trabajar todos por igual? A. G.: Vamos a priorizar algunos temas u objetivos: ciudades saludables, uso de la tierra y biodiversidad, paz e instituciones, energías renovables y consumo responsable. Semana Sostenible: Están trabajando con las regiones. ¿De qué manera? A. G.: Existe mucho interés en las regiones. El foco es Latinoamérica; sin embargo, uno de los temas de estudio que nos interesa es la desigualdad en el interior de los países. Cómo un país puede lograr los ODS, pero al mismo tiempo ampliar las disparidades. Es algo que vamos a analizar e intentar medir. Le puede interesar: Del compromiso empresarial al cambio colectivo También tenemos pensado que los ODS sean tema de discusión en las elecciones territoriales. Que hagan parte de las conversaciones que van a tener los candidatos con la ciudadanía y los medios de comunicación. Y, luego, trabajar con los alcaldes y gobernadores elegidos en la elaboración de los planes locales de desarrollo. Semana Sostenible: Finalmente, ¿lo vamos a lograr? ¿Vamos a cumplir con la Agenda 2030? ¿Qué implicaciones tendría no alcanzarla? A. G.: Probablemente no todo se va a cumplir. Los Objetivos de Desarrollo del Milenio eran más sencillos, dependían en buena medida de la voluntad política de los Estados. Aquí, deben hacerse compatibles con el desarrollo económico, el desarrollo social y la sostenibilidad. Las consecuencias de no cumplirlos o de desecharlos como un discurso serán trágicas. Se trata del futuro de la humanidad, de un desafío sin precedentes en la historia. Semana Sostenible: ¿Pensar en lo decisivo del futuro de la humanidad lo hizo asumir este nuevo reto? A. G.: Me ha tocado reinventarme varias veces en mi vida. Me gustan los temas nuevos. Me gusta cada cierto tiempo aprender de un tema, trabajar con la gente y en ese aprendizaje aportar.