Científicos de todo el mundo están haciendo todo lo posible para encontrar la manera de restablecer la biosfera marina, para que los corales y arrecifes no desaparezcan para siempre. Y es que las noticias no son esperanzadoras: la Gran Barrera de Coral perdió solo en 2016 el 30% de sus corales y el blanqueamiento coralino se está acelerando en todo el mundo.Y aunque los arrecifes coralinos ocupan menos del 1% de toda la superficie oceánica, su pérdida supondría un desequilibrio, dice Dave Vaughan, quien trabaja en la recuperación de corales. “Es como cuando si mirásemos el desierto, pero habiendo perdido todos los oasis”, añade.Vaughan, director ejecutivo de Mote Tropical Research Laboratory en Summerland Key, Florida, espera que todos colaboren. El próximo año, su proyecto pretende producir 50.000 nuevos corales vivos. Entre los próximos dos y cinco años, podría ser un millón.Sexo coralino, la nueva esperanzaEl logro de Vaughan fue encontrar la manera de restablecer el arrecife coralino a través de la reproducción sexual. “El coral más predominante es uno ramificado, como el coral cuerno de ciervo, que se reproduce a sí mismo si se rompe”, explica. Es una forma de reproducción asexual.Sin embargo, los corales masivos, como corales cerebro o cavernosos, que son los que conforman el arrecife, se reproducen sexualmente, continúa diciendo. Este dato se supo después de los años 80 del siglo XX.La mayoría de la sanación del arrecife, es decir, la fragmentación y el transplante, toma mucho tiempo y solo funciona a pequeña escala. Sin embargo,  la reproducción de corales en la Gran Barrera  y en otras regiones produce miles de millones de huevos y esperma. “Si usas el poder de esta fecundación en masa, puedes capturar la larva y regresarla al sistema del arrecife y dejar que las ganadoras crezcan”.Un golpe de suerteVaughan cuestionó durante mucho tiempo el método de reproducción asexual de los corales al fragmentarlos y devolver las partes al océano, sobre todo, por la lentitud del crecimiento. Debido a la pérdida tan rápida de corales de los últimos años, Vaughan necesitaba acelerar el proceso de sexo coralino. Pronto creó bebé corales en probetas en el laboratorio y tuvo éxito fecundándolos diez veces más rápido que de forma natural. Sin embargo, solo crecían dos centímetros durante el primer año. “Estaba muy decepcionado con el resultado”, dice.Entonces, un coral se le cayó sin querer y semanas más tarde, notó que las piezas crecían con rapidez. Al romperlas “las estimulábamos al mismo tiempo para que crecieran del tamaño de los tres últimos años en solo un par de meses”, explica. Decidió entonces romper cientos de microfragmentos de los corales fecundados. Volvieron a crecer rápidamente.Ahora está convencido de que plantará millones de corales en el arrecife de Florida, el más grande del mundo.Otro aspecto muy importante es que están reproduciendo corales que sobrevivirán en el agua afectada por el cambio climático. “Estamos estimulando las condiciones del futuro para ver qué corales serán resistentes en el océano del mañana”, añade Vaughan.A la búsqueda de súper coralesVerena Schoepf, de la University of Western Australia and the ARC Centre of Excellence for Coral Reef Studies, está investigando los arrecifes del oeste australiano, donde hay corales que son resistentes al calor.Si se comprende el mecanismo que origina que el coral sea más tolerante al agua caliente, se podría entonces criar súper corales resistentes al clima.Sin embargo, Schoepf se muestra algo escéptica con respecto a la recuperación de los corales. “Estos esfuerzos, independientemente de que funcionen bien, no serán suficientes para salvar los arrecifes de corales a escala global”, dice a DW.