En noviembre de 2020, el embajador de Dinamarca en Colombia, Erik Høeg, se paseó en bicicleta por las ciclorrutas de Medellín y sus municipios cercanos para conocer los avances en la implementación del Plan Metropolitano de la Bicicleta, que impacta la infraestructura y las políticas públicas que facilitan e impulsan este medio de transporte en la región.
Los recorridos de altos funcionarios, como el del diplomático danés se han vuelto cada vez más frecuentes en el Valle de Aburrá, pues desde diferentes países ha nacido el interés por conocer las buenas prácticas que se adoptaron en el Área Metropolitana del Valle de Aburrá, relacionadas con planeación urbana, movilidad, medioambiente y desarrollo sostenible.
“Vamos a seguir en contacto con el Área Metropolitana y a mirar qué puede hacer la embajada para fortalecer los intercambios con ciudades de mi país. Hay una trayectoria común hacia la sostenibilidad y veo posibles intercambios en temas como movilidad verde, ciclismo, residuos y reciclaje, en donde mi país, y su capital Copenhague, es considerado un referente mundial”, aseguró el embajador Høeg al finalizar su visita.
Hoy, casi un año después, ya hay resultados. El asesoramiento y experiencia de países como Dinamarca y Países Bajos, con su embajada de la bicicleta, ha sido clave para los proyectos de movilidad sostenible de la entidad, y en particular para poner en funcionamiento, desde octubre 2021, un plan piloto del sistema público de préstamo de bicicletas eléctricas, el primero en su tipo en Colombia, que estará activo por cuatro meses para luego comenzar oficialmente a operar.
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Cooperación descentralizada
Pablo Marcelo Maturana, subdirector de Cooperación y Convenios del Área Metropolitana del Valle de Aburrá, explica que la cooperación descentralizada, con recursos que provienen de fundaciones, organizaciones civiles, entre otros estamentos no oficiales, ha permitido entrar en contacto con entidades a través de las cuales se pudieron postular iniciativas que se tradujeran en convenios y asociaciones para cofinanciar proyectos y obtener acompañamientos técnicos.
Uno de los proyectos insignia fue el convenio establecido con la Embajada de Francia para intervenir dos de las edificaciones públicas del municipio de La Estrella: la sede administrativa de la Alcaldía y el hospital. Esta intervención consistió en el ajuste arquitectónico de las dos construcciones para promover el uso de fuentes alternativas de generación de energía.
Otra iniciativa que avanza con éxito es el convenio con el Consulado de Brasil para apadrinar un colegio público también en el municipio de La Estrella y enseñar a sus estudiantes portugués. En el marco de este programa algunos alumnos y maestros de la institución recibirán una beca para afianzar sus aprendizajes en territorio brasileño.
El objetivo es seguir reforzando el bilingüismo en el Valle de Aburrá, con opciones distintas al inglés como segunda lengua. “Estos ejercicios de cooperación y de relacionamiento se cuantifican en el largo plazo. Hemos tenido un acercamiento muy bueno con las embajadas, con resultados muy positivos. Tenemos enlaces entre los municipios y las subdirecciones de la entidad y con los representantes de los países nos sentamos y realizamos un trabajo en conjunto para generar proyectos”, expresa Maturana y agrega que el convenio de bilingüismo está próximo a ejecutarse.
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