La seguridad es un tema que siempre ha dado de qué hablar en el país. Más allá de la percepción, en los últimos seis meses, a la vez que se ha evidenciado una disminución en algunos delitos, en otros se ha observado un incremento. Lo que preocupa a varios mandatarios departamentales ha hecho dirigir sus esfuerzos hacia medidas para garantizar la seguridad en sus poblaciones.
Según las más recientes cifras del balance de criminalidad de la Policía Nacional, en este primer semestre de 2024 se ha presentado una reducción general de delitos como homicidio, hurto, secuestro y terrorismo, en comparación con la vigencia 2023. No obstante, otros delitos como la extorsión (17,8%), la violencia intrafamiliar (48,7%) y las lesiones personales (11,4%) han presentado aumentos sustanciales. Asimismo, en zonas rurales se han seguido reportando problemáticas como el asesinato de líderes sociales y el desplazamiento.
Ante este panorama, los gobernadores de departamentos como Santander, Chocó, Meta, Arauca, Caquetá, Tolima, Bolívar y Córdoba contaron, en el programa Hablan los Gobernadores, algunas de las gestiones en materia de seguridad en sus territorios. Algunos incluso señalaron la necesidad de implementar programas multidimensionales donde, además de garantizar la seguridad en las regiones, también le proporcionen a sus poblaciones el acceso a mejores condiciones sociales.
“Nosotros partimos de un concepto de seguridad multidimensional, es decir, no solo apostarle a la seguridad militar y policial a la que estamos acostumbrados, sino que también le incluimos factores de estabilidad social. Si le falta agua potable, si le faltan escuelas, salud, conectividad; dependiendo del nivel de riesgo, es donde nosotros buscamos aplicar la acción unificada para llevar a cabo las obras y solucionar los problemas”, aseguró Juvenal Díaz, gobernador de Santander.
Con él coinciden los mandatarios de Chocó, San Andrés Islas y Córdoba, quienes fueron enfáticos en expresar que para que realmente exista mayor seguridad debe haber mayores oportunidades para sus comunidades. “Hasta tanto no lleguen las oportunidades que transformen el territorio, la ilegalidad y la informalidad se van a volver la oportunidad para la gente”, apuntó al respecto Erasmo Zuleta, gobernador de Córdoba.
Por su parte, en el departamento del Chocó, la gobernadora Nubia Córdoba, enfocó su proyecto de seguridad en erradicar la minería ilegal, formalizando esta actividad económica para “quitarle el pulmón a los grupos armados”, esto debido a que en este territorio, la minería se ha convertido en la principal fuente de financiamiento de actos delictivos.
Mientras tanto, Luis Francisco Ruiz, gobernador del Caquetá; Yeison Rojas, gobernador del Guaviare y Erasmo Zuleta, de Córdoba, resaltaron la importancia de reforzar los diálogos de paz en sus territorios, dentro de las zonas en que se mantiene latente la presencia de grupos al margen de la ley.
“Hemos sostenido ya cuatro consejos de seguridad ampliados a nivel nacional y regional, sin contar lo que ya hacemos nosotros del orden departamental, porque evidentemente hoy estamos al frente de un Proceso de Paz donde el Caquetá y la región de la Amazonía y la Orinoquía son el eje fundamental para detener la violencia en el país”, indicó Luis Francisco Ruiz.
En el departamento de Bolívar, a pesar de que en cuestión de indicadores ha mejorado la seguridad, el gobernador Yamil Arana afirmó que seguirá trabajando para que las cifras de muertes por criminalidad lleguen a cero. Mientras que Andrés Julián Rendón, gobernador de Antioquia, Rafaela Cortés, gobernadora del Meta y Renson Martínez, gobernador de Arauca, proponen fortalecer el pie fuerza en las principales zonas de conflicto para proteger a las comunidades.
“Hemos recorrido el territorio. Arrancamos haciendo tres consejos de seguridad. Fuimos, por ejemplo, a Puerto Rico (Meta), donde supuestamente la comunidad sacó al Ejército y cuando hicimos el consejo de seguridad en la vereda de Puerto Toledo, nuevamente el ejército volvió. Hemos trabajado muy articulados con la fuerza pública y la única forma de combatir todo esto es que la seguridad vuelva, que la gente vuelva a confiar, que baje la extorsión, que la gente confíe en las instituciones. Yo creo que es la única forma que podemos combatir toda esa delincuencia”, expresó la gobernadora del Meta, Rafaela Cortés.
Por último, Adriana Matiz, gobernadora del Tolima, reconoció que en el sur de su departamento hay un gran problema con disidencias de las Farc y en la parte central tolimense la modalidad de hurto de motocicletas incrementó; por eso puso en marcha el programa “Especialización de las Regiones”, para identificar las distintas problemáticas en esta área y así combatir la inseguridad con mayores oportunidades en los municipios, a través del turismo y la cultura.