Las ciudades más felices del mundo son aquellas en las que sus ciudadanos se sienten más a gusto en relación con su entorno. Precisamente, esto es lo que busca la más reciente campaña de la Gobernación del Valle: ‘Cali, volvamos a sonreír’, una iniciativa en la que las autoridades locales deben trabajar de la mano de la gente y por eso sus mensajes se han concentrado en incentivar el civismo y el buen ánimo entre los caleños.
Un buenos días, una sonrisa o un gesto amable, como ceder la silla en el transporte público, le pueden alegrar el día a alguien. Y este es justamente el mensaje que quiere posicionar la Gobernación a través de esta campaña. “Va dirigida a quienes queremos esta ciudad, quienes la sentimos y disfrutamos de sus espacios, la valoramos y queremos verla renovada. Estamos a tiempo de aportar lo mejor de nosotros para cambiarle la cara, con buenas acciones”, explicó Clara Luz Roldán, gobernadora del departamento.
Ayudar a un anciano a cruzar la calle, dar vía a peatones y animales, respetar las señales de tránsito, recoger el excremento de las mascotas, no arrojar basuras ni fumar en espacios públicos y solucionar los conflictos a través del diálogo, son ejemplos de las acciones que la Gobernación está convencida le pueden cambiar la cara a Cali. En esta tarea, Roldán apuesta a que el trabajo conjunto con la ciudadanía hará de la capital del Valle la ciudad que todos anhelan. “Que propios y turistas la sientan como un hogar. Para eso debemos ser ejemplo de civismo, amabilidad, tolerancia y sentido de pertenencia”, precisó la mandataria.
Sonreír facilita la comunicación, libera endorfinas, serotonina y otros analgésicos naturales que contribuyen a aumentar el bienestar y reducir los niveles de estrés. Por eso, ‘Cali, volvamos a sonreír’ es parte del mensaje central de esta campaña que promueve la construcción de espacios sanos, donde se respete la vida, se reconozca el arte, la cultura y el deporte como agente de paz y transformación y se involucren a las nuevas generaciones.
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