¿Por qué una multinacional de alimentos decide apoyar e impulsar el fútbol femenino?

Paula Pacheco: Si bien nuestro fuerte está en hacer pan y productos deliciosos para la gente, también tenemos una responsabilidad con los ciudadanos para impulsar una conversación en torno a tener una vida activa y saludable. En ese orden de ideas, empezamos a ver qué tipo de iniciativas sobre hábitos de vida saludable podíamos promover, específicamente enlazadas a la promoción del deporte, con un enfoque de género. En el proceso, identificamos que teníamos valores en común con el FC Barcelona, razón por la cual hicimos una alianza para ser Global Partner del Club y Main Partner de su primer equipo de fútbol femenino. Además, nos impulsó a sacar otra iniciativa enfocada en Centroamérica y Latinoamérica que se llama Campeonas de sueños y está dirigida a niñas y adolescentes que practican fútbol.

¿Cuál ha sido el impacto de Campeonas de sueños?

P.P: Dentro del proyecto tenemos tres frentes de acción. En el primero entra todo lo asociado con equidad de género. Desde allí, lo que hacemos es seleccionar escuelas de fútbol que estén alrededor de nuestras plantas. Una vez son escogidas, le entregamos a las niñas que integran estas escuelas una dotación deportiva e implementos necesarios para sus entrenamientos diarios, como uniformes, balones, conos, entre otros. El segundo pilar consiste en transmitir a las escuelas de formación una metodología basada en fútbol para la transformación, que busca hacer que durante sus entrenamientos haya un espacio para apropiarse de diversos valores y herramientas sociales para tomar mejores decisiones dentro y fuera de la cancha. Para ello nos aliamos con una organización que se llama Fundación Selección Colombia que ya tiene la metodología incorporada y la aplica con las escuelas de fútbol, en donde la participación de los entrenadores es clave. Finalmente, el tercer componente tiene que ver con el tema de nutrición: entregamos un producto a las niñas para complementar su alimentación -en alianza con los bancos de alimentos- y hacemos un proceso de transferencia de conocimiento sobre hábitos saludables y nutritivos.

En América Latina esta iniciativa se está implementando en 9 países: Colombia, Ecuador, Venezuela, Costa Rica, Panamá, Honduras, Guatemala, Nicaragua y El Salvador. | Foto: Bimbo

¿Quiénes pueden beneficiarse de este programa y cuáles son los requisitos para vincularse?

P.P: Principalmente buscamos escuelas de fútbol que estén alrededor de nuestras plantas de producción. Otro criterio es que sean comunidades en situaciones de vulnerabilidad, para así, garantizar que realmente estemos llegando a una población que normalmente tiene poco o ningún acceso a este tipo de iniciativas. Siendo así, estamos impactando a las escuelas de fútbol, para que se apropien de una metodología y luego por sí solas la continúen incorporando. También hemos llegado a las comunidades en donde se encuentran las familias de estas deportistas. De hecho, en noviembre haremos un ejercicio de cierre con la comunidad para abordar los temas que he mencionado, pero tendrán mayor profundidad para la población. Incluso, a futuro pensamos tener alianzas con otras entidades para poder ayudar a estas comunidades en diferentes temas. Entre más gente impactemos en la comunidad, tanto a familias como a las niñas que están participando, mucho mejor.

¿En qué países se implementará esta iniciativa y qué alcance tendrá a nivel nacional?

P.P: Este es un programa que con mucho orgullo estamos implementando en este momento. En América Latina estará centrado en 9 países: Colombia, Ecuador, Venezuela, Costa Rica, Panamá, Honduras, Guatemala, Nicaragua y El Salvador, en donde buscamos llegar a más de 1.170 niñas y adolescentes entre 8 y 10 años. A nivel nacional buscamos generar un impacto en seis ciudades: Cali, Medellín, Barranquilla, Tenjo, Bogotá y Armenia, donde tenemos como objetivo llegar a 420 niñas.

Colombia ha sido el primer país en el que se activó el programa, en una escuela femenina ubicada en Tenjo, ¿cómo ha sido ese proceso?

P.P: Digamos que estos meses han sido para un proceso de identificación de las niñas, de hacer la convocatoria. Particularmente en Tenjo la escuela hace convocatorias anuales para que las niñas se vinculen. Estuvimos identificando los perfiles para hacer un diagnóstico general, por ejemplo, identificando aspectos étnicos o si había niñas en condición de discapacidad. Cabe reiterar que para nosotros estas características no generan ningún tipo de restricción. Además, estuvimos haciendo un seguimiento a los temas administrativos y operativos, no solo allí, sino de manera simultánea en todas las ciudades.

Campeonas de sueños se empezó a ejecutar este año, ¿hasta cuándo continuará activo el programa y cuáles son las expectativas?

P.P: El anuncio se hizo el año pasado, en línea con la alianza con el equipo de Barcelona, pero el programa Campeonas de sueños se está desarrollando este año, de hecho entre junio y mitad de julio vamos a hacer los lanzamientos a nivel local. La idea es que se mantenga durante el 2023. Hasta el momento tenemos casi 17 escuelas de fútbol en los nueve países. El propósito es dejar esa capacidad instalada para que en el 2024 se puedan escoger nuevas escuelas de fútbol y nuevas organizaciones que también puedan verse beneficiadas con esta metodología. Es importante aclarar que este es un proyecto que busca generar un impacto social, que va más allá de la competencia. Es decir, el fútbol es la excusa para llegarle a estas mujeres y a estas niñas, con un tema de valores y formación como seres humanos.

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