Hasta el 18 de octubre se celebran las Fiestas del Plátano en Sabaneta, ‘el vallecito de encanto’ del sur del Valle de Aburrá, en Antioquia. Este tradicional evento, que cumple 26 años desde su primera edición, tiene el propósito de homenajear la agricultura y las costumbres del municipio, y reactivar la economía local de diferentes sectores como el de la gastronomía, las artesanías y el turismo.

Sabaneta es el municipio más pequeño de Colombia, reconocido durante mucho tiempo por sus cultivos de plátano. Una fruta suave, dulce, que se vendía especialmente en las plazas de mercado de Envigado y Medellín. Según Santiago Montoya, alcalde de Sabaneta, “no nos resistimos a perder nuestra cultura. En los jardines tenemos matas de plátano de manera decorativa, pues para nosotros es importante mantener la tradición. Antioquia es reconocida por ser un departamento altamente productor de alimentos, los referentes plataneros de la región siempre han sido el Urabá y Sabaneta”, agrega.

Esta celebración incluye exposiciones, conferencias, ferias de emprendimiento, presentaciones musicales, jornadas de salud y espacios educativos. Daniel Pareja, director de la Casa de la Cultura de Sabaneta, explica que durante estos días la comunidad sabaneteña y los turistas se encuentran para visitar espacios dedicados a exaltar la cultura, el arte y el desarrollo económico. “Hablar de estas fiestas es hablar de la memoria gastronómica y cultural del municipio”, precisa.

Esta edición tiene una connotación especial, pues después de los confinamientos por la pandemia, esperan más de 30 mil visitantes diarios durante las Fiestas del Plátano que contribuirán a la reactivación económica. Otro de los objetivos es resaltar el talento artístico de Sabaneta y por eso se incluyó una muestra de diez esculturas de las aves endémicas de la región hechas con flores.

Los silleteros de Santa Elena, protagonistas de la tradicional Feria de las Flores de Medellín, fueron los encargados de crear las esculturas de la tucaneta esmeralda, el guacamaya bandera, el cacique candela, el barranquero, pinche, reinita de fuego, gavilán pollero, carriquí de montaña, el torito cabecirrojo y el pájaro carpintero. “Fuimos doce silleteros que pusimos las manos para que el mundo disfrute nuestro hermoso trabajo”, comenta Edwin Grajales, uno de los silleteros.

El próximo lunes 18 de octubre las fiestas finalizan con el Festival del Sancocho.