En una pequeña institución de educación primaria en la vereda Las Peñas en Barbosa, Antioquia, la profesora Gloria Toro convirtió su pasión por la astronomía en un método de enseñanza transversal, que la llevó a crear y diseñar un planetario para sus estudiantes con el apoyo de sus hijos y la comunidad. Toro realizó un taller de construcción de planetarios escolares en el Congreso Aula Bajo las Estrellas del Planetario de Medellín.
“Me tomé el trabajo de hacerlo en la escuela partiendo desde cero porque no tenía ni espacio, ni materiales”, explica. Y recuerda que fue muy difícil al comienzo porque es una institución educativa rural con muy poquitos recursos.
La estructura que armó es una cúpula semiesférica de tres metros de diámetro hecha de materiales reciclables como papel periódico y cartón paja. “Son casi 105 triángulos que forman hexágonos y pentágonos, y se soporta sobre sillas escolares pequeñas”, precisó Toro, quien contó que antes de lograr levantarla casi se da por vencida. Fueron tres intentos fallidos para conseguirlo.
Al planetario pueden entrar 15 personas al mismo tiempo. Después de unos segundos de oscuridad se enciende un proyector de estrellas que se refleja en el domo. “Allí están las constelaciones del firmamento grabadas y cuando se prende se ven todas”, detalla Toro.
Logan Monsalve, estudiante de sexto grado de bachillerato en otra institución de la vereda, confiesa que en el planetario de Toro aprendió a mirar el cielo. “Conocimos sobre las estrellas, cómo se conforma el universo, los planetas, la teoría del Big Ban. Veíamos los puntitos, teníamos que diferenciarlos y unirlos con líneas, eso sí, después de analizarlos y detallarlos muy bien para luego decir sus nombres”, comenta.
Ahora cada vez que Logan mira al cielo despejado logra identificar las constelaciones de Capricornio, Virgo, Perseo, la Osa Menor y la Osa Mayor.
En la vereda Las Peñas hay cerca de 50 hogares, en su mayoría conformados por madres cabeza de familia o padres que trabajan en el sector de la construcción. La mayoría se entusiasmó con el proyecto, del que disfrutan estudiantes desde preescolar hasta quinto de primaria.
“Cuando nos habló del planetario nosotros llevamos a los niños de la zona urbana hasta allí”, cuenta John Jairo Posada, rector del colegio Presbítero Luis Eduardo Pérez Molina. En aquellas visitas los alumnos de Toro se convirtieron en los guías de los demás estudiantes. “Hay unos muy comprometidos e interesados por el tema que terminan siendo líderes que enseñan a otros”, asegura Toro.
“El planetario se ha convertido en un núcleo para enseñar ciencias, matemáticas, sociales, en fin, es una experiencia muy enriquecedora”, precisa Posada. La profesora Toro reconoce que hoy en día es un programa pedagógico importante para la comunidad. “Me permite transversalidad en todas las áreas, porque cuando proyecto un video o una imagen puedo hablarles a los estudiantes de cualquier materia”.
Con su planetario Toro obtuvo el Premio Experiencias Significativas, que otorga la Gobernación de Antioquia, y diseño una conferencia de capacitación dirigida a los docentes. “También hizo un taller en varias instituciones de la zona urbana y a raíz de esto nació la idea de construir un planetario similar en el Liceo Manuel José Caicedo”, comenta Posada.
En Antioquia, gracias al Parque Explora y el Planetario de Medellín, se encuentran cinco planetarios escolares en Barbosa, Bello e Itagüí. El proyecto ha despertado el interés de extranjeros que llegan hasta Las Peñas solo para conocer el domo, que pronto espera volver a abrir sus puertas pues ha permanecido cerrado por la pandemia.
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