Después de la pandemia, el modelo de trabajo híbrido se ha consolidado como una alternativa viable para muchas empresas y profesionales independientes. De hecho, el modelo híbrido, que combina trabajo en la oficina con el remoto, se ha consolidado como un elemento de retención o atracción laboral, que muchas veces es más importante para los trabajadores que salarios competitivos o bonos de alimentación y transporte.

De acuerdo con el estudio de WeWork ‘Más allá de la revolución híbrida: la paradoja del trabajo flexible en Latinoamérica’, en el que se encuestaron a más de 8.000 personas de Colombia, México, Costa Rica, Chile, Argentina y Brasil, el 64 por ciento de quienes participaron afirmaron que si tuviera que elegir un esquema de trabajo optaría por el modelo híbrido gracias a la flexibilidad que otorga y a los beneficios que genera en el entorno personal y profesional.

Para Juan Carlos Peñaloza, country manager de WeWork Colombia, la creciente demanda de flexibilidad por parte de las empresas y los colaboradores está impulsando el desarrollo del modelo de Real Estate as a Service, es decir, ofrecer soluciones flexibles de zonas de trabajo que se adaptan a las necesidades de las organizaciones y a los colaboradores en espacios multifuncionales, con diferentes opciones de ocupación (por horas, días, meses), y servicios adicionales como salas de reuniones, wifi, entre otros.

“Las ventajas son muchas, y no solo está diseñado para el trabajador autónomo o el emprendedor, quien encuentra un ambiente más dinámico y la posibilidad de conectar con otros profesionales, sino también para las empresas, a las que les implica reducción de costos y una mayor eficiencia en la gestión de su espacio, permitiendo a los colaboradores enfocarse en sus tareas y mantener un equilibrio entre la vida personal y laboral”, precisó Peñaloza.

También hay retos en la implementación del modelo Real Estate as a Service. Los principales son la visibilidad laboral, coordinación de equipos y separación del trabajo diario con la vida personal;  a pesar de ello, afirma Peñaloza, el modelo de trabajo híbrido seguirá posicionándose, pues las empresas necesitan adaptarse a la nueva realidad para seguir siendo competitivas.

En Colombia se avanza  en la adopción de este modelo y la expectativa es que crezca en los próximos años, en línea con las tendencias globales. Precisamente, para sintonizarse con esta tendencia, WeWork, amplió su core de productos y creó All Access Pass, un “Bono de Oficina” que se ajusta a las demandas de la fuerza laboral actual.

“Con este beneficio las compañías entregan una membresía de WeWork a sus colaboradores para que puedan trabajar, junto con sus equipos, en espacios ubicados cerca a sus hogares, construir un esquema de trabajo flexible alineado con el propósito de la empresa y con los valores de las personas que trabajan en ella, y como solo se cobra cuando el colaborador lo utiliza, las empresas evitan gastos por espacios de oficina que no se utilizan”, indicó Peñaloza.

Con este programa los usuarios pueden acceder de manera ilimitada a un escritorio en un espacio de trabajo compartido en más de 700 ubicaciones en el mundo. En Colombia WeWork tiene edificaciones en puntos estratégicos de Bogotá, Barranquilla y Medellín.