Ya son 630.000 los productores del sector ganadero que le apuestan a la sostenibilidad mediante prácticas que involucran a todos los actores de la cadena: proveedores de insumos y distribuidores de productos cárnicos y lácteos, quienes además de cumplir con los requerimientos del ICA, invierten en proteger al medioambiente.

Manuel Gómez, director de Ganadería Sostenible de Fedegan, explicó que desde hace más de una década se viene impulsando un proyecto para fomentar el manejo sostenible de la ganadería, que fue apoyado por el gobierno del Reino Unido, el Fondo para el Medio Ambiente Global (GEF), The Nature Conservancy (TNC), la Fundación Centro para la Investigación en Sistemas Sostenibles de Producción Agropecuaria (CIPAV) y el Fondo para la Acción Ambiental, bajo la supervisión del Banco Mundial.

Entre las principales acciones implementadas se encuentra la conservación de bosques y la restauración y adopción de sistemas silvopastoriles, que han permitido una captura de carbono, medida y avalada por el Ideam, de cerca de 1,6 billones de toneladas de CO2.

Otro de los grandes esfuerzos tiene que ver con la ganadería regenerativa, un sistema de producción agroforestal que no utiliza fertilizantes, insecticidas o pesticidas provenientes de síntesis química y, además, implementa estrategias de manejo que protegen y restauran los nacimientos hídricos, como es el caso de la finca El Púgil, ubicada en el municipio de Puerto Triunfo, que a pesar de contar con áreas transformadas por el uso intensivo del suelo, ya ha logrado recuperar algo de bosques.

Otro de los ejes para consolidar una cadena productiva más sostenible es el de la legalidad, en el que es clave la tenencia de tierras, verificada mediante la afiliación de los productores a comités de ganaderos, donde se registra que los predios cuenten con los documentos que certifiquen su legalidad y se asesoran para que vendan sus productos a las cadenas formales.

Gómez agregó que uno de los retos más importantes es la deforestación y seguir afianzando el trabajo de capacitación, acompañamiento y comunicación para optimizar las inversiones y lograr mejores resultados en materia de sostenibilidad económica, social y ambiental, donde prime el cuidado del bosque, el agua y la biodiversidad.