En Mocoa, Putumayo, está uno de los yacimientos más grandes de pórfido de cobre y molibdeno del país, cuya exploración está a cargo de la minera Libero Copper. Esta compañía, clave en la transición energética al explorar minerales estratégicos como el cobre, tiene grandes proyecciones en Colombia y de la mano con su operación, adelanta importantes proyectos sociales en el territorio.
De acuerdo con Thyana Álvarez Claro, vicepresidenta de Libero Copper & Gold y Outcrop Silver & Gold, una de sus mayores contribuciones tiene que ver con el empleo local, pues según la ejecutiva, el 90% de su equipo proviene de las zonas donde tienen operación.
“Priorizamos siempre la mano de obra local, todo el talento del territorio. El 90% de nuestro equipo es de los territorios donde realizamos nuestra exploración”, explicó Álvarez.
En ese mismo sentido, la ejecutiva cuenta que le dan gran prioridad al encadenamiento productivo, buscando que en su gran mayoría las compras se realicen en las regiones, para lo cual impulsan las capacidades de empresas y proveedores locales.
Por otro lado, Libero Copper aporta a las comunidades a través del mejoramiento de infraestructura, el impulso a emprendimientos locales y proyectos de educación. De hecho, este último punto es una de las principales apuestas de la empresa de exploración minera, al considerar que esta es una herramienta clave para el desarrollo regional.
“Nos dimos cuenta que muchas de nuestras comunidades tenían solo primaria o bachillerato. En ese sentido, buscamos que ellas terminen su primaria, su bachillerato, pero adicional a eso continúen en carreras técnicas, tecnológicas o profesionales, para que crezcan dentro de la empresa”, expresa Thyana Álvarez, quien añade que se espera que muchas de esas personas puedan terminar haciendo parte de las áreas directivas de la compañía.
Las acciones ambientales de Libero Copper en Mocoa
El principal norte social de Libero Copper tiene que ver, justamente, con su sentido de operación. Dice la web de la compañía que buscan impulsar la transición energética y el desarrollo económico, para lo cual es necesario garantizar un suministro sostenible de cobre.
Según las Naciones Unidas, entre los minerales más transversales para la transición energética se encuentran precisamente el cobre, el litio, el níquel o el cobalto. Todos ellos necesarios para fabricar los circuitos, baterías y demás tecnologías esenciales para la fabricación de paneles solares, transformadores, vehículos eléctricos, entre otros.
Sin embargo, como en todo tema minero, eso debe ir de la mano con un alto grado de compromiso con procesos ambientales y sostenibles, que no conviertan el proceso en una paradoja ambiental de enormes proporciones. Algo que tiene muy claro Libero Copper, quien adelanta numerosas acciones en el territorio, estableciendo alianzas con comunidades e instituciones en torno a la protección de los ecosistemas y recursos naturales.
Una de esas acciones consistió en una alianza con el SENA y la Universidad EAN, junto a los que Libero Copper ha capacitado a miembros de la comunidad en muestreo y gestión del agua, para que luego estas personas puedan hacer parte activa en estudios de referencia ambiental y en el monitoreo de la calidad del agua.
De igual manera, la compañía asegura que ha plantado más de dos mil árboles nativos alrededor de fuentes de agua dentro del área del Proyecto Mocoa, “lo que ayuda a preservar y revitalizar los ecosistemas locales”. A eso hay que sumarle la participación de Libero en la Alianza Ruta Verde, que impulsa la transición de Colombia y este caso puntual promueve una cadena de producción de cobre con participación local, con la mínima huella ambiental e impulsando la economía circular.
*Contenido en Libero Copper & Gold.