El departamento del Tolima tiene varios símbolos representativos. Entre ellos, la riqueza musical, sus paisajes, la lechona, los tamales, las achiras y, por supuesto, el Aguardiente Tapa Roja. “El vínculo que existe entre el Tapa Roja y los tolimenses no es solo por su tradición, productividad o identidad, son lazos muy fuertes cosechados por casi un siglo, abrazados por una bandera que fortalece todos los símbolos de este territorio y por la inversión social, que en el fondo es nuestro propósito”, asegura Franz Bedoya Rubio, gerente de la Fábrica de Licores del Tolima.
La marca es una de las principales aportantes a la estructura económica del gobierno departamental, que utiliza estos recursos para fortalecer el deporte y la salud de los tolimenses. “La junta directiva de la Fábrica, en cabeza de nuestro gobernador, Ricardo Orozco Valero, tiene claro que la producción y presencia institucional debe tener los mejores resultados. Esta contribución, que apenas es un pequeño aporte de toda la gestión y logros de nuestro gobernador en favor de la salud, nos llena de satisfacción en virtud de las buenas decisiones tomadas al inicio de la pandemia. Se rescató el Hospital Federico Lleras Acosta, sede Limonar, lo que permitió salvar muchas vidas”, agrega Bedoya Rubio.
Entre el 2020 y el 2021 la Fábrica de Licores del Tolima le ha transferido al departamento 18.000 millones de pesos. Estos importantes aportes se lograron conseguir gracias a una gestión adecuada de las finanzas, las ventas y la producción por parte de la organización, que en los últimos años ha reconquistado varios mercados y se ha expandido para llegar a nuevos clientes y consumidores con sus productos insignia: el tapa Roja tradicional, el Azul Special y el Verde 24. A esto se suma el lanzamiento del nuevo Tapa Roja Oro, que, de acuerdo con Bedoya Rubio, ha generado un incremento importante en las ventas.
Además, las líneas de aguardiente llegaron a otros departamentos del país como Cundinamarca, Putumayo, Atlántico, Bolívar, Risaralda y Quindío. Todo esto se ha logrado a pesar de la coyuntura económica generada por el covid-19. Cuando inició la emergencia, la fábrica empezó a producir alcohol antiséptico como respuesta a las necesidades del sector salud y como una alternativa productiva rentable en medio de la crisis. El proyecto, en principio, fue liderado por el Gobernador y significó un reto lanzar un producto nuevo, porque “implicaba enfrentarnos a marcas y productos muy reconocidos en el mercado, pero rápidamente entendimos que podíamos competir y posicionar nuestro producto como aliado en hospitales y centros de salud”. Hoy, el alcohol producido en el Tolima ha llegado a ocho ciudades capitales del país.
A medida que avanza la vacunación y la tasa de contagios y muertes disminuye, la economía del departamento se ha ido recuperando. “La pandemia por estos días nos ha dado un respiro y eso ha permitido que coja fuerza la reactivación económica del Tolima. Han mejorado las ventas en centros comerciales, tiendas, supermercados, grandes superficies y en bares y discotecas. Además, nuestra presencia institucional es muy importante en distintos eventos de carácter nacional, incluyendo patrocinios a reinas que han traído títulos al Tolima, como la reciente corona del Festival Nacional del Bambuco”, cuenta el gerente.
La Fábrica de Licores es el patrocinador oficial del Deportes Tolima, actual campeón del fútbol profesional colombiano. Esta es una alianza de tiempo atrás, incluso en los años ochenta el equipo llevó el nombre de Tapa Roja Tolima. “La tercera estrella fue un hecho que vivimos con emoción y que nos hace sentir orgullosos de lo nuestro. De esta manera nuestra marca contribuye con el deporte y con otro de los íconos de nuestra región”, concluye Bedoya Rubio.