Integrada por ocho municipios, con una extensión de 932,51 kilómetros cuadrados, la provincia Sabana de Occidente es uno de los motores de desarrollo de Cundinamarca. Según el Dane, aporta el 18,7 por ciento del PIB departamental. Su principal actividad económica son los servicios, seguida por la industria y, finalmente, la extracción y obtención de materias primas. Carolina Español, secretaria de Planeación del departamento, destacó que “el Índice Provincial de Competitividad (ICPC) 2021-2022 mostró que Sabana Occidente sigue siendo la segunda provincia más competitiva de Cundinamarca y hoy transita hacia un modelo de abastecimiento eficiente, sostenible y competitivo”.
La actividad primaria es liderada por Mosquera con una producción que alcanzó los 354.000 millones de pesos gracias a la agricultura y la ganadería. Luego se ubica el municipio de Madrid, con 229.000 millones de pesos generados por el cultivo de alimentos. En El Rosal y Facatativá se destaca la agroindustria, en Funza, Subachoque y Bojacá el agro, y en Zipacón el agro y la ganadería.
La actividad secundaria se fundamenta en la producción de tres municipios. El primero es Funza, que alcanzó una producción de 2.192 millones de pesos, consolidándose como el centro industrial crucial de la región. Luego se ubican Facatativá, con 1.999 millones de pesos gracias a la transformación de productos agrícolas y a la manufactura, y Madrid con 882.000 millones de pesos.
El sector terciario es el mayor generador de empleo y valor agregado de los municipios de la provincia. Facatativá es el principal polo con una generación de recursos por 1.780 millones de pesos. Bojacá y Zipacón registran una menor participación. De acuerdo con Español, son varios los factores que contribuyen a la competitividad de la región: su cercanía con Bogotá, el desarrollo industrial, la infraestructura, la agricultura, el turismo, el crecimiento urbano y el mercado laboral. “En conjunto, todos estos factores hacen de Sabana Occidente un motor económico clave, contribuyendo al desarrollo regional y al bienestar de sus habitantes”, destacó.
El fortalecimiento de este proceso, según la funcionaria, se fundamenta en el desarrollo de proyectos para optimizar la cadena logística y productiva, mejorar la infraestructura de movilidad y la implementación de nuevas tecnologías para la gestión inteligente como, por ejemplo, la Red vial logística regional, el Centro de Logística y Abastecimiento Regional y la Reutilización de Infraestructura para la Economía Regional.
“Sabana Occidente cumple un papel crucial en la economía del departamento de Cundinamarca. Su ubicación estratégica, que conecta a Bogotá con diversas regiones del país. También alberga una gran cantidad de industrias y empresas de distintos sectores, lo que contribuye significativamente a la generación de empleo y al desarrollo económico local y regional”, explicó Orlando Castro, presidente de la Cámara de Comercio de Facatativá (CCF).
El dirigente gremial destacó que las actividades económicas de la provincia “son diversas y con una contribución significativa a la economía del departamento”. La industria manufacturera responde por el 14 por ciento (3.030) del total de las empresas matriculadas, el sector comercio participa con el 53 por ciento (11.046 matrículas), servicios con el 30 por ciento (6.194 matrículas), y agricultura con el 3 por ciento (641 matrículas).
Otro de los factores que seguirá estimulando el crecimiento de la provincia es la colaboración entre los sectores público y privado, pues genera alianzas estratégicas para promover el desarrollo sostenible. Miguel Alejandro Flechas, decano de la Facultad de Ciencias Administrativas, Económicas y Contables de la Universidad de Cundinamarca, subrayó que esta región cuenta con un gran potencial económico debido a cuatro factores: la concentración industrial, el desarrollo de servicios, el crecimiento demográfico y la urbanización y dinamización del comercio.
“Sabana de Occidente alberga una diversidad de empresas que contribuyen significativamente al desarrollo regional y nacional. Aunque no existe un ranking oficial y definitivo de las principales, podemos identificar algunos sectores clave y compañías destacadas que han consolidado su presencia en la zona”, aseguró. Y destacó que esta región tiene “gran potencial económico en Cundinamarca gracias a su ubicación estratégica, infraestructura y crecimiento demográfico”. Sin embargo, enfrenta desafíos que limitan su influencia como, por ejemplo, la desigualdad social, la presión sobre los recursos naturales y la concentración de la actividad económica.
La secretaria de Planeación del Departamento consideró fundamental la implementación de políticas para generar empleo, mejorar la calidad de vida de los habitantes y asegurar el desarrollo sostenible. También planteó la necesidad de fomentar la educación y la captación de la fuerza laboral en esta provincia. Finalmente, el presidente de la Cámara de Comercio de Facatativá aseguró que es clave fomentar el emprendimiento y la innovación, así como buscar soluciones a dos problemas: la congestión del tráfico y la falta de infraestructura vial para soportar el crecimiento demográfico y económico.