Así como la tecnología ha sido un aliado fundamental para la transformación y mejoramiento de procesos en la industria, el agro, las finanzas y la educación, el sector de la construcción también se ha beneficiado de nuevas e innovadoras soluciones que hoy hacen parte de sus acciones estratégicas.

Además de economizar costos, la transformación digital les ha permitido afinar los tiempos de ejecución de los proyectos, contribuir al medioambiente y evitar reprocesos para cumplirles a los clientes con la promesa de valor pactada.

Una de las tecnologías que ha generado grandes eficiencias en la construcción alrededor del mundo es Building Information Modeling (BIM), que se ha robustecido como una metodología de trabajo colaborativa que integra y centraliza todas las dimensiones para la ejecución de un proyecto. Gracias a esta nueva forma de hacer las cosas, en una sola plataforma conviven información geométrica, cronograma, costos, entre otros aspectos claves de un proyecto.

En Colombia, Amarilo ha sido una de las firmas pioneras en la adopción de la metodología BIM y en 2015 arrancó su implementación. Camilo Castro, director de BIM para esta constructora, explicó que esta tecnología puede verse como “un modelo tridimensional que tiene toda la información de un proyecto de construcción”.

Con el respaldo de BIM, los compradores reciben lo que está estipulado en los planos y, además, no deben incurrir en el pago de sobrecostos. | Foto: Getty Images

Además de contener las múltiples dimensiones que abarca la ejecución de un proyecto, explica Castro, articula el proceso de construcción desde el arranque, en donde inclusive están las áreas de mercadeo y ventas. “Se articula un repositorio de información pensado en cómo se va a coordinar, presupuestar y construir”, apuntó.

Pero ¿cómo beneficia al cliente que una tecnología como BIM forme parte del proceso? La respuesta, explicó Castro, se resume en que se ahorran costos, se reducen tiempos (para cumplir la fecha de entrega pactada), e incidentes de posventa. En resumen, facilita la eficiente coordinación del proyecto, entre todas las partes.

Con el respaldo de BIM, los compradores reciben lo que está estipulado en los planos y, además, no deben incurrir en el pago de sobrecostos. “Con BIM los costos de construcción se reducen, básicamente por buena planeación”, agregó Castro, quien detalló que en el país la metodología BIM se asocia hoy con la Norma ISO 19650 de Gestión Integral de la Información, a lo largo del ciclo de vida de un activo.

En la cotidianidad de arquitectos, ingenieros, interventores, entre otros actores de los proyectos, el BIM ha permitido acceder en tiempo real, y de manera simultánea en 3D, no solo a los diseños, sino también a todos los aspectos estratégicos del proyecto, para su revisión y realización observaciones, de acuerdo con cada rol. “Todo va en la nube, sin correos ni nada. Obreros y residentes llevan diseños en sus celulares. Eso evita transportar planos como antes”, detalló Castro.

Con BIM desde la planeación de la obra pueden incorporarse materiales y sistemas que se reflejan en ahorros de energía, agua y de la huella de carbono. | Foto: Getty Images

Por su parte, la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol) creó de la mano de varios de los actores del sector una entidad llamada BIM Forum Colombia, a través de la cual todos los participantes estandarizan a nivel nacional la normativa BIM y dan a conocer sus buenas prácticas. Esta instancia, que ya es un referente nacional, trabaja para, en 2026, pulir la estandarización e incluirla como normativa dentro del plan BIM Colombia, que tiene el gobierno.

En todas las dimensiones que acoge el BIM la sostenibilidad también tiene su espacio, ya que desde la planeación de la obra pueden incorporarse materiales y sistemas que se reflejan en ahorros de energía, agua y de la huella de carbono por cuenta de la utilización, por ejemplo, de cementos de bajo impacto.

Maquetas digitales

Las tradicionales maquetas, que hasta hace unos años formaban parte del paisaje de las salas de ventas, también podrían estar en vía de extinción. Amarilo, con la adopción de la tecnología en los diferentes frentes del negocio constructor, vio la oportunidad de poner en maquetas digitales algunos de sus proyectos.

Esta nueva tecnología, que ya está disponible en la sala de ventas del proyecto Parques de Fontanar de Amarilo, en Chía (Cundinamarca), hará posible que los futuros compradores puedan tener claro, a través de recorridos 360, la ubicación del proyecto, sus zonas comunes, vías de acceso, entre otros factores.

“En Amarilo estamos en constante innovación para estar siempre a la vanguardia y ofrecerles a nuestros clientes experiencias destacadas. Sabemos que comprar vivienda es uno de los momentos más importantes en la vida de las familias y por eso queremos que lo vivan de la mejor manera. Con estas maquetas virtuales les brindamos a nuestros clientes herramientas para conocer en detalle cada proyecto y que puedan recorrer todos sus espacios en tiempo real”, explicó Franshesca Espinel, gerente de mercadeo de Amarilo.

Según Espinel, antes se tardaban más de 45 días hábiles en hacer una maqueta física para presentarla a los clientes. Ahora de la mano de la tecnología estos tiempos se redujeron a 15 días. Adicionalmente ahorran en materiales y no se generan residuos.

*Contenido elaborado con apoyo de Amarilo.

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