El desplome del puente Chirajara en el kilómetro 64 de la vía que de Bogotá conduce a Villavicencio conmocionó al país a comienzos de 2018. Nueve personas murieron y ocho resultaron heridas de gravedad. Aunque varias de ellas fueron remitidas a hospitales cercanos a la zona del accidente, la mayoría se trasladaron a la Clínica Nueva del barrio Palermo en Bogotá, en donde finalmente se recuperaron. “Afortunadamente los que llegaron aquí salieron adelante, con muchas dificultades médicas, pero lo lograron. Estos pacientes presentaban fractura de las extremidades inferiores, que acompañaban lesiones vasculares severas”, aseguró Rodrigo Ignacio Quijano, director general de la institución. La Clínica Nueva, es reconocida a nivel nacional por su énfasis e investigaciones en neurociencias y por sus avances en cirugías complejas de columna para corregir escoliosis, hernia discal, canal cervical estrecho, radiculopatías y fracturas complejas.
Uno de los procedimientos más complejos es la corrección del desvío de columna. “La cirugía se llama escoliosis de 360 grados. Se toma toda la columna y se endereza por completo. Por supuesto, el proceso está sujeto a exámenes que determinan la viabilidad del tratamiento”, explicó el director de la clínica y precisó que debido a que estas son cirugías de alta complejidad, con posibilidad de riesgo hasta un año después de la operación, todos los candidatos deben ser remitidos por aseguradoras. “No todos los pacientes son aptos para las cirugías, por eso, previamente tienen que pasar por un filtro y deben ser revisados por un especialista”, aclaró.
De acuerdo con el informe Global Burden of Disease (GBD), realizado por el Banco Mundial en 2019, aproximadamente 1.710 millones de personas en el mundo viven con afecciones musculoesqueléticas que afectan articulaciones, huesos, músculos y áreas o sistemas múltiples del cuerpo. Ese mismo estudio evidenció que el dolor lumbar es el principal síntoma en los pacientes que padecen alguna de estas dolencias.
Esta institución además se especializa en manejo de ortopedia de alto nivel, cirugía plástica, diagnóstico cardiovascular invasivo y trauma complejo. Así mismo, “los traumas faciales severos ocasionados por accidentes laborales o de movilidad van en aumento, y en la Clínica son atendidos por profesionales altamente experimentados en nuevas tecnologías para la reconstrucción de fracturas faciales graves. De igual forma, a través de herramientas digitales nuestro equipo de cirugía maxilofacial reconstruye de manera tridimensional las fracturas y por medio de impresión 3D se imprime la imagen, no sólo de los huesos ya operados virtualmente, sino también el material que vamos a utilizar para fijar dichas fracturas. Con lo anterior, brindamos una mayor seguridad intraoperatoria, más confianza al paciente y resultados más predecibles. El sistema de salud actual permite realizar estos procedimientos, sin generar gastos adicionales para el paciente”, detalló el director.
De otra parte, los cambios, remodelaciones y reestructura han permitido que la clínica, en términos de sostenibilidad, se haya afianzado. Además, cuenta con el plus de estar en la zona central de la ciudad, que acoge fácilmente a usuarios de todos los sectores de Bogotá y la Sabana.
Por ello ha sido importante la atención que ofrece la Clínica Nueva, que actualmente está equipada con 96 camas, 13 de ellas de cuidado intermedio y 15 de cuidado intensivo, cinco quirófanos y dos salas de procedimiento. “Tenemos excelentes indicadores epidemiológicos, de seguridad del paciente, control de infecciones y satisfacción. Además, ofrecemos acompañamiento psicosocial, dando así atención integral, una característica que logramos por pertenecer a una obra congregacional misional. Somos una clínica pequeña, con una amplia cobertura en áreas importantes y tenemos la capacidad para seguir adaptándonos a los nuevos retos que plantee el sistema de salud en Colombia”, concluyó el doctor Quijano.
Más de cinco décadas de historia:
1880: Se funda en Villa de Leyva la Congregación de Dominicas de Santa Catalina de Sena. Su misión se enfocó en la salud, la educación y las acciones misionales.
1958: La Congregación de Dominicas de Santa Catalina de Sena crea la Clínica Nueva, en Bogotá, como una institución hospitalaria privada con servicios de pediatría, obstetricia, medicina interna y cirugía.
1974: Las directivas de la Clínica Nueva deciden enfocarse en la atención de la población adulta, ofreciendo solo servicios de medicina interna y cirugía 24/7.
1990: El Instituto Neurológico de Colombia deja de funcionar y la Clínica Nueva decide expandirse al campo de la neurociencia.
2015: Las hermanas Dominicas de Santa Catalina de Sena deciden reestructurar la institución, continúan con la acción misional, pero adoptan un modelo empresarial.
2023: La Clínica Nueva sigue liderando trabajos científicos en neurociencias y es especialista en cirugía de columna, cirugía general, ortopedia, urología y manejo de trauma y trauma mayor.
*Contenido elaborado con apoyo de la Clínica Nueva
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