Desde Exponencial Confirming, una compañía de factoring electrónico con más de 11 años en el mercado, María Camila Muñoz fue una de las pioneras en la transformación digital del sector financiero en Colombia. A través del uso de tecnologías y junto a un gran equipo de trabajo, creó un producto financiero accesible para las grandes, medianas y pequeñas empresas que buscaban optimizar sus procesos de facturación de clientes y proveedores, con un capital de trabajo eficiente y disponible desde cualquier lugar del mundo.
Recién graduada de Administración de Empresas, Muñóz empezó a trabajar en Corfinsura, entidad que posteriormente adquirió Bancolombia, desde donde tuvo sus primeros acercamientos a la tecnología con la creación de un sitio web que le mostraba a los empresarios las dinámicas y movimientos del dolar minuto a minuto.
Allí identificó que el desarrollo de productos de factoring era una solución manual, documental y desactualizada que solo llegaba a las grandes empresas. Esto la motivó a crear un plataforma digital más cercana y amigable con los pequeños y medianos empresarios que usualmente no cuentan con el capital necesario para la inversión en este tipo de productos transaccionales. “Lo que hacíamos era utilizar tecnología para hacer eficiente una operación financiera que no era muy accesible para la gran mayoría de los clientes potenciales: las pequeñas compañías”.
A pesar de que el camino como emprendedora ha estado lleno de retos, Muñoz reconoce que el éxito de la compañía que hoy lidera se lo debe a su confianza y a un equipo de trabajo que la ha acompañado desde los inicios en su propósito de brindar soluciones más simples y efectivas para las MiPymes.
Uno de los desafíos con los que se encontró en su trayectoria profesional fue combatir los estereotipos dentro de un sector mayormente ocupado por hombres. En muchas ocasiones se sintió sola e intimidada, pues era frecuente llegar a reuniones atravesadas por comentarios cargados de machismo, que la hacían dudar de sus capacidades.
Romper techos de cristal
Actualmente, Muñoz ve una oportunidad de transformación para el sector, pues afirma que hay una deuda pendiente con las mujeres en la creación de productos financieros que entiendan sus contextos y necesidades que hasta el día de hoy no habían sido tenidas en cuenta por la industria financiera.
De igual forma, inspirar a que más mujeres se sumen al sector financiero y tecnológico se ha convertido en una de sus metas. “Solo el 5 por ciento de las fintech están lideradas por mujeres y los equipos directivos solo tienen el 20 por ciento de participación femenina”, advierte. Es por eso que cuando se encuentra con otras mujeres que lideran compañías dentro del sector, no duda en expresarles su admiración por recorrer el mismo camino que ella y apostarle a cerrar las brechas de género y romper los techos de cristal.
“En este momento de mi vida siento mucha afinidad con el reto de transmitir a otras mujeres que sí se puede y que a partir de un cambio del modelo de pensamiento podemos generar negocios y emprendimientos y los objetivos que quieran lograr”, señala.
En su caso, Muñoz destaca con orgullo el haber alcanzado sus logros profesionales de la mano de su rol como madre. Afirma que aunque fue retador teniendo en cuenta que vivimos en una sociedad que asocia el ser mujer con las labores del cuidado, el amor por sus dos hijos, de 16 y 18 años, le permitió demostrarse a sí misma y a los demás que ser mamá no debía convertirse en una limitante para alcanzar sus propias metas.
De cara a su futuro, esta líder empresarial quiere ser una fuente de inspiración para más mujeres, con el objetivo de apoyarlas y motivarlas a emprender, a “ser independientes financieramente, sin limitaciones y ataduras a su entorno”.