Irán sigue en el radar de la comunidad internacional, que pide el fin de la represión, en medio de condenas que han sido consideradas como “desproporcionadas” y que se intensificaron tras la muerte (en septiembre pasado) de la joven Mahsa Amini. Su deceso se produjo mientras estaba bajo custodia policial por, supuestamente, no portar ‘debidamente’ su hiyab.
Desde su muerte, la República Islámica ha estado permeada por una ola de movilizaciones que piden eliminar la coacción sobre los derechos de las mujeres a decidir y el respeto por la vida. En el marco de las protestas, las autoridades han llevado a cabo miles de detenciones y acusaciones que, para organismos humanitarios, no han seguido el debido proceso.
Según la ONG Iran Human Rights, hasta la fecha unas 520 personas (entre ellas 70 menores de edad) han fallecido, y sus decesos, desde que comenzaron las movilizaciones hace cuatro meses, los atribuye a las fuerzas de seguridad. Otro punto son las sentencias tanto a muerte como a prisión que se han aplicado hasta a deportistas y artistas.
Este martes, 17 de enero, la cineasta Mozhgan Ilanlu fue condenada a casi diez años de cárcel y 74 latigazos, al ser arrestada por publicar unas fotografías sin el hiyab (velo obligatorio en ese país de Oriente Medio). Medios internacionales como Diario Correo señalaron que la condena se divide en varios actos, considerados por Irán como delitos.
Exactamente, ¿de qué se le acusa?
El primero de ellos es “colusión” contra la seguridad de la nación (por el que se le imputaron seis años de prisión), 15 meses por participar en desorden público y la misma cantidad de tiempo por presuntamente incitar a acciones ilegales, recogió el diario Shargh. Sumado a esta pena, se estableció contra Ilanlu una multa de aproximadamente 200 euros.
Para la cineasta, la sentencia la veta, además, para integrar organizaciones sociales y actividades “mediáticas” durante al menos dos años. Diario Correo recoge que luego de su aprehensión estuvo más de un mes en aislamiento en la cárcel de Evin (en Teherán, la capital), reclusión en la cual se habría roto una pierna.
Según el Centro para Derechos Humanos de Irán (CHRI), unas 20 personas han sido sentenciadas a muerte en los últimos meses y sobre más de 40 reposan cargos que podrían derivar en la misma condena. Ese organismo estima que la cifra de ejecuciones es superior a la revelada hasta ahora.
Piden liberación de cineasta iraní
En la República Islámica, el primer sindicato de cineastas exhortó a las autoridades para que liberen al disidente, Jafar Panahi, quien permanece detenido desde julio. “La Casa del Cine pide una vez más con insistencia a las autoridades judiciales plantearse la posibilidad de la liberación de Jafar Panahi, lo antes posible”, señaló la asociación en un comunicado difundido en su página web.
Panahi tiene 62 años y es considerado como uno de los cineastas iraníes más reconocidos. Su detención tuvo lugar el 11 de julio y, según la justicia de ese país, debe enfrentar una pena de seis años; de acuerdo con un fallo de 2010, lapso al que se remontan los choques que ha mantenido con la justicia.
De acuerdo con AFP, Panahi fue galardonado con el León de Oro en el año 2000 durante el Festival de Venecia por la película El círculo. También recibió el Premio del Guión en Cannes en 2018 por Tres caras.
Según esa agencia de noticias, la condena se fijó al ser acusado de realizar “propaganda contra el régimen”, luego de su apoyo al movimiento de protesta de 2009 contra la reelección a la presidencia de Mahmud Ahmadinejad.